El éxito de cualquier actividad que queramos realizar va a depender de una buena planificación y preparación, así como de equiparar la ruta a nuestra capacidad física y técnica para poder disfrutar de la misma. Si nos excedemos con los objetivos y no planificamos correctamente, lo que pudiese parecer una ruta de ensueño se puede convertir en algo muy diferente. Si es nuestra primera ruta lo mejor es que no la realicemos solos: gana la experiencia que otorga un grupo y aprende y anota todos los pequeños detalles que antes habíamos pasado por alto. Además, imagínate realizándola solo, y piensa qué material necesitarías y si te ves capacitado para hacerla. Evidentemente, las rutas en solitario nos aportan las mejores experiencias y nos ayudan a conocernos, pero si no tenemos la experiencia necesaria podemos pasarlo muy mal. Las rutas en grupo necesitan ser planificadas entre todos, teniendo muy en cuenta a la persona menos experimentada técnicamente y la capacidad física real del grupo, adaptándose al miembro menos preparado.
Planificar la ruta
Si nunca has planificado una ruta te recomiendo que empieces buscando material ya trabajado, bien una guía de rutas en bicicletas o en Internet, donde lo tienes prácticamente todo y te restará mucho trabajo de búsqueda. Los principales datos que tienes que recopilar son:
La distancia total de la ruta en kilómetros, dividiéndola entre el número de kilómetros que somos capaces de hacer a la hora y así saber el número de horas que tenemos de ruta. Si no queremos equivocarnos, dividiremos los kilómetros entre 10, que es el numero de kilómetros medio que se suele hacer por hora, con unos 300 metros de desnivel. Una vez calculado esto necesitaremos uno o varios mapas donde esté incluida la ruta que hemos elegido, para así dividir las distintas etapas en función del lugar donde pasar la noche, el desnivel al que nos enfrentaremos por etapa, pasos de dificultad, etc.
Niveles de dificultad física y técnica
La mejor recomendación de planificación es que la ruta no exceda de 12 días, si no será demasiado pesada. Los dos primeros días serán de rodaje, el tercero conviene que no sea demasiada paliza para no fatigar el cuerpo al principio y a partir del quinto día será rodar y rodar. Si la ruta es demasiado larga deberíamos plantearnos hacer rutas alternativas durante el viaje, que no sea todo bicicleta para desconectar y descansar. Si hacemos rutas durmiendo y comiendo durante el camino tendremos que llevar demasiado peso y esto nos impedirá realizar rutas técnicas y disfrutar del trayecto. Manejar una bici con peso es muy complicado y peligroso en ciertos trayectos. Lo mejor es llevar un vehículo escoba con el equipaje y material, de manera que no lleve tanto peso el grupo y disfrute de caminos más técnicos, bien sea una persona caritativa que se quiera apuntar al proyecto de la ruta o entre los mismos miembros. También viene muy bien para adelantarse en los recorridos e ir preparando las llegadas. Si alguien enferma o está agotado podrá proseguir en la ruta hasta recuperarse. Si pensamos alojarnos en refugios debemos reservar con antelación y preguntar si tienen espacio para guardar la bici.
Es importante diferenciar entre una ruta pedalera y sencilla donde se puede ser autónomo total y llevar equipaje, de una ruta técnica donde necesitaremos sentirnos ágiles para poder disfrutarla, si no nos pasaremos el día andando y empujando la bici. Si esto es así no hemos hecho una buena planificación y acabaremos cansados de la ruta.
Hay que hidratarse bien durante la ruta y durante el descanso: en rutas en altura perdemos mucho más líquido, por lo que debemos obligarnos a beber. La alimentación tiene que ser variada y rica en hidratos de carbono: desayunaremos fuerte y picotearemos durante la ruta fuentes de energía de asimilación rápida. Nos regalaremos una buena merienda/cena, es decir, comeremos bien pero no nos acostaremos hasta que finalicemos la digestión o nos sentiremos muy pesados al día siguiente.
El equipo para la ruta
Lo primero es saber si seremos autónomos en la ruta o contaremos con un vehículo escoba: con un vehículo el tema del peso ya no tiene importancia y podremos cargar más por si acaso. En cambio si tenemos que portear con todo, tendremos que decidir en función de la ruta, ya que una ruta técnica no nos permitirá ir cargado con mucho peso y tendremos que hospedarnos y comer durante el camino. Si decidimos ser autónomo total, la ruta no debe de ser muy técnica y el desnivel a superar tampoco debe ser demasiado grande.
La bici. Tendrá que estar en perfecto estado de revista antes de aventurarnos, con todos los componentes listos, los frenos revisados, las pastillas nuevas (con peso se gastan mucho mas), la suspensión, etc. Las cubiertas deben ser nuevas y se adaptarán al tipo de recorrido. Las llantas tienen que estar también en perfecto estado (ojo con la fatiga de los radios, los llantazos por golpes, etc.). Antes de salir llevaremos la bici a un taller y que hagan una puesta a punto.
El transporte de material. Si no vamos a ser autónomos, con una mochila pequeña donde llevar el agua, algo de comida, ropa para la lluvia, algo de abrigo (en montaña el tiempo es muy cambiante), un frontal y un kit de reparación será suficiente. Ésta no puede exceder de 4 kg. Si queremos transportar más peso tendremos que ir a portabultos traseros y unas alforjas. Para poco peso podemos utilizar un portabultos a la tija que no exceda de más de 8 kg, si no se moverá o incluso partirá y nos podemos quedar sin tija durante el recorrido (esta opción es muy buena para las bicis de doble suspensión). Para más peso lo mejor es un porta bultos de tres varillas que nos permita llevar hasta 25 Kg, para más peso llevar un remolque ya que los portabultos delanteros con peso hacen impracticable el manejo de la bici y se puede hacer muy pesada la ruta. El material lo repartiremos en bolsitas de plástico para que no se moje si llueve o si se queda abierto algún recipiente con líquido en el interior. El material que tenemos que llevar para una ruta de varios días es igual que para un fin de semana, lo que nos falte lo compraremos y lo que no se utilice lo quitaremos (hay que minimizar y apañarse con lo básico). La comida la podemos ir comprando por etapas de uno o dos días y la ropa la podemos lavar por el camino (la ropa térmica se seca rápido). Piensa en ropa para el calor, lluvia y frío en zonas altas de montaña y noche... No se nos debe olvidar el protector solar y las gafas, muy importantes para protegernos los ojos de ramas y sol.
Reparaciones. El material necesario depende mucho de si vamos solos o en grupo, de si contamos con un vehículo, etc. Lo que más se suele utilizar es un par de cámaras, parches (kit de pinchazo), desmontables, bomba de aire, herramienta multiusos con navaja, cordino resistente, bridas, cinta americana, troncha cadenas, grasa liquida, pastillas de cambio (llevar apuntado modelo y año por si tenéis que comprar), pastillas de freno (con peso duran menos), etc. Si vamos solos tendremos que elegir lo imprescindible, en grupo podremos repartiros el material y con vehículo nos podemos permitir llevar más. Todo depende de por dónde realicemos la ruta: por Europa podemos encontrar fácilmente tiendas/taller donde poder comprar de todo, pero si hacemos una ruta por África, más vale ir preparados ya que encontrar repuestos es bastante más difícil.
También es muy importante llevar el mapa abierto durante la ruta por lo que es recomendable llevar una porta mapas con tablilla y basculante en el manillar que siempre esté abierto por la ruta y que tenga un buen protector de agua.
Preparación física
Prepararse para una ruta es conocerse a sí mismo y las distintas limitaciones que uno tiene para luego mejorarlas. Primero tendremos que saber cuál es la distancia que somos capaces de recorrer en un día sin darnos la paliza de nuestra de vida, respetando el calentamiento general antes de comenzar con la bici, el inicio suave con la misma hasta que los músculos empiecen a coger temperatura, el pedaleo constante y la vuelta a la calma con los estiramientos al terminar. Respetar esto es importantísimo para poder rendir al día siguiente. Una vez que hemos ido aumentando en días sucesivos la distancia y el desnivel en las rutas, pasaremos a rutas algo más técnicas y comprometidas para ir ganando compromiso. Viene muy bien ir detrás de compañeros más experimentado para ir copiando su técnica gestual y manejo de la bici. Una vez que veamos que somos capaces de afrontar etapas de una cierta distancia con comodidad y disfrute, añadiremos el peso que llevaríamos durante una ruta y averiguaremos qué tal nos manejamos y en cuánto aumentamos el tiempo y el cansancio en la ruta. Seguidamente empezaremos etapas de 2 o 3 días para ir ajustando nuestra condición física a lo que lo que haremos en el futuro y haremos pruebas a la hora de repartir el peso, ver qué nos falta y qué nos sobra. Como todo deporte, lo mejor es la constancia y el entrenamiento planificado (pide ayuda) para luego saborear un mayor disfrute en nuestros viajes y rutas de montaña. Debemos ser sinceros con nuestro nivel, así disfrutaremos de las pequeñas rutas que nos darán motivación para las grandes.
Trucos y consejos
- Lavar el culotte cada dos días para limpiar el sudor acumulado y si somos propensos a las rozaduras, a modo preventivo, le daremos una fina capa de crema hidratante para bebés en la badana del culotte.
-Si tenemos que viajar en avión o tren para embalar la bici, lo mejor es que pidamos una caja de cartón en nuestra tienda habitual, generalmente las regalan ya que tiran muchas a diario de las bicis que reciben. Al llegar al destino la tiraremos. Para el regreso buscaremos una tienda de bicis y pediremos una nueva caja, dependiendo del dependiente no suele haber nunca problemas y en el peor de los casos nos cobrarán algo. Avisar con tiempo, no siempre reciben bicis y sobre todo si sois un grupo. Llevar la bici en maletas o grandes bolsas tiene el impedimento de que habrá que cargar con ellas al llegar al destino. En cuanto al precio de facturación depende más que de la compañía aérea, de la persona que nos facture, y puede oscilar entre 0 y 150 euros. ¡Sonreíd mucho y sed simpáticos!
En cuanto al tratamiento de las bicis o los retrasos de llegada, solo conozco una reclamación y llegó al día siguiente. Si queréis estar tranquilos lo mejor es asegurar el viaje, el material y la posible devolución. No os carguéis las vacaciones, podéis alquilar una bici y luego pedir cuentas a la aseguradora (resuelve todas las dudas antes de del viaje).
- Llevaos un candado pequeño y una cadena fina de eslabones de 1.80 m. para atar la bici en refugios, aunque tengan guarda-bicis, o paradas donde estéis al tanto de la bici. Si nos quieren robar da igual el candado que llevemos, pero evitaremos que se la lleven en hospedajes donde tienen guarda bicis grandes y no saben a quién pertenece cada bici. Colocad el candado alto para que no puedan partirlo contra el suelo (les costara más).
- Es muy importante llevar siempre el casco puesto. Si nos da mucho calor compraremos uno más ventilado. ¡También en las subidas!
FÁCIL
- Ideal para iniciarse en los viajes activos.
- Actividad. 2-5 horas la mayor parte de los días.
- Distancias. Pedalear 10-40 Km. la mayor parte de los días.
- Superficies. Terreno plano con algunas subidas.
- Desnivel acumulado. Hasta 700 metros diarios.
- Altitud sobre el nivel del mar. Hasta 2.000 metros.
MODERADO
- Para iniciados y algo más.
- Actividad. 4-6 horas la mayor parte de los días.
- Distancias. Pedalear 20-60 Km. la mayor parte de los días.
- Superficies. Terreno montañoso con subidas y bajadas empinadas y senderos.
- Desnivel acumulado. Más de 1.000 metros diarios.
- Altitud sobre el nivel del mar. Más de 2.000 metros.
ALTO
- Recomendado para viajeros en forma con habilidades básicas.
- Actividad. 5-8 horas la mayor parte de los días.
- Distancias. Pedalear 40-75 Km. la mayor parte de los días.
- Superficies. Terreno montañoso, expuesto, con subidas y bajadas empinadas y senderos poco evidentes.
- Desnivel acumulado. Más de 1.500 metros diarios.
- Altitud sobre el nivel del mar. Hasta 3.000 metros
MUY ALTO
- Diseñado para viajeros en muy buena forma.
- Actividad. Más de 10 horas diarias.
- Distancias. Pedalear hasta 75 Km. o más la mayor parte de los días.
- Superficies. Montañas lejanas con terreno expuesto, con subidas y bajadas empinadas y caminos poco evidentes en los que es fácil desorientarse.
- Desnivel acumulado. Más de 2.000 metros diarios.
- Altitud sobre el nivel del mar. Puede superar los 4.000 metros.