Cuando nos encontremos ante una situación comprometida, como las mencionadas al comienzo del artículo, no debemos olvidar que lo primero que debemos hacer es un análisis rápido de la situación y de los posibles riesgos al realizar la maniobra. No es lo mismo estar en una repisa cómoda, que colgados en un desplome, o que nuestro compañero nos vea y sepa lo que estamos haciendo, que esperar a que ocurra algo sin ningún tipo de comunicación.
Todo escalador, que más o menos sepa lo que está haciendo, debe llevar siempre consigo:
- Tres o cuatro mosquetones de seguridad HMS (pera).
- Una cinta larga de reunión.
- Un reverso o en su defecto placa y cesta para asegurar al primero o al segundo.
- Un aro de cordino de 6mm. unido por un nudo pescador.
Podemos añadir un micro-bloqueador tipo Tibloc, por sus distintas utilidades en caso de emergencia y por su ligereza.
Con el material arriba descrito debemos poder subir por una o dos cuerdas fijas, según la situación, sin añadir nada más, teniendo en cuenta que llevar menos supone no estar a la altura de la actividad que estamos realizando o supeditando toda la responsabilidad y seguridad a nuestro compañero de escalada.
Una vez metido en la situación de la cual tendremos que salir airosos, lo primero que debemos hacer es determinar si la maniobra de ascenso la vamos a realizar por una o dos cuerdas. Es decir, si la actividad la estamos realizando con una cuerda de uso en simple, donde está claro que ascenderemos por ella, o por el contrario nos encontramos con dos cuerdas de escalada de uso doble o gemelo, donde tendremos que saber si éstas están fijadas en su parte superior o por el contrario simplemente están pasadas por unas argollas como en un rápel, las dos tienen que tener la misma tensión y sujeción para que no caigamos al vacío. Confundirnos en esta particularidad puede ser un error fatal y ante la duda conviene emplearlas como si ambas cuerdas no estuviesen fijas.
Realización de la maniobra o técnica
Si nos fijamos en la imagen para poder analizar mejor la maniobra, nos daremos cuenta que ésta se divide en dos punto de sujeción a la cuerda fija de escalada. Uno en la parte superior “A” y otro al nivel de la cintura “C”. Éstos son puntos de deslizamiento ascendente sobre la cuerda de escalada o sujeción, siendo siempre de bloqueo en descenso. Para realizar la maniobra debemos saber coordinar los movimientos y los elementos de deslizamiento para estar siempre fijos en uno de los dos puntos “A” y “C”.
Dicho de otra manera, cuando el peso de nuestro cuerpo esté cargado sobre el punto “C”, aprovecharemos para deslizar de manera ascendente el punto “A”, hasta lo máximo que podamos, luego nos colgaremos de este (punto A), y deslizaremos la cuerda sobre el punto “C” hasta que quede bien tenso y así descargar nuestro peso sobre él, para así repetir la operación deslizando nuevamente el punta “A”.
Así, tendremos claro cómo funciona el sistema de ascenso que con práctica y coordinación veremos que es un sistema rápido y cómodo de ascenso con elementos de fortuna. Tened en cuenta que las cuerdas son dinámicas y hasta que éstas queden totalmente estiradas nos será más difícil ascender por ellas.
Si nos fijamos nuevamente en la imagen, veremos que la forma de conectarnos con el punto “A” es mediante el cabo de anclaje, punto “B”, para garantizarnos que si fallase el punto “C” quedaríamos colgado de éste. Si este cabo es regulable también nos servirá en caso de quedarnos totalmente colgados en un desplome mientras escalamos de segundo, ya que nos será muy difícil realizar esta maniobra para colocar el punto “C”·. Mientras que si al quedarnos colgados colocamos el punto “A” y a su vez nos colgamos de éste con ayuda del cabo regulable en corto (con ayuda de un estribo o cinta “punto D” podremos remontar nuestro cuerpo sobre el punto “A”) para así ganar el suficiente espacio para colocar el punto “C” que luego nos permitirá ascender de manera cómoda.
Una vez analizada la imagen principal de la maniobra, veremos que podemos utilizar en cada punto.
Punto A: Nudo Bachman con mosquetón de seguridad HMS y aro de cordino de 6mm.
Lo ideal es utilizar un mosquetón en el cual nos quepa toda la mano, para utilizar éste como un puño jumar. En su defecto utilizaremos el mosquetón que tengamos.
Si nos fijamos en la imagen veremos que lo primero es introducir el coordino “C” sobre el mosquetón “A” sujetándolo en la parte superior, y éste a su vez lo pondremos paralelo a la cuerda fija “B” como vemos. Daremos aproximadamente cinco vueltas alrededor del mosquetón y la cuerda dejándolos bien fijos mediante el coordino. Si nos fijamos en la imagen el cierre del mosquetón queda hacia el exterior.
Una vez dadas la cinco vueltas “B”, en el sobrante del cordino (donde debe quedar el nudo pescador del aro del cordino “C”) colocaremos un mosquetón sobre el cual colocaremos un estribo de emergencia y el cabo de anclaje. Si este mosquetón “D” no fuese de seguridad, es recomendable que el mosquetón del cabo de anclaje vaya directamente sobre el cordino para evitar que se salga. La idea de tener mosquetones diferentes es para así poder independizar los elementos en caso necesario. Imagínate que al llegar a la reunión tenemos que estar subidos sobre el estribo que está sujeto sobre el Bachman, para así estar más altos y por no tener mosquetones independientes (cabo de anclaje) no podemos anclarnos a la reunión, teniendo que montar otro cabo de anclaje empleando más material y tiempo.
IMPORTANTE: este nudo solo funciona como bloqueo cuando cargamos el peso sobre el cordino inferior (zona donde está el nudo pescador), ya que si nos colgamos sobre el mosquetón que está dentro del nudo como función de jumar éste deslizará.
Estribo o cinta con nudo de alondra.
Permitirá cansarnos menos al poder ayudarnos con una pierna durante el ascenso con el nudo Bachman, en vez de hacer todo a pulso con el brazo (error).
A: Bachman
B: Mosquetón inferior de ajuste del cordino
C: Cinta cosida con nudo de alondra
Si nos fijamos, veremos que en el mosquetón inferior le hemos añadido una cinta cosida con un nudo de alondra en la parte inferior de esta, teniendo en cuenta la longitud de la cinta, permitiéndonos estar cómodos durante la maniobra.
En el nudo de alondra colocaremos el pie, de manera que podamos subirnos sobre la cinta como si de un estribo se tratase. Si vemos que el nudo se aprieta demasiado sobre el empeine, haciéndonos daño sobre él, podremos anudar de manera normal con un nudo que no sea corredizo.
Punto C: Nudo Remi.
Es un nudo que nos permitirá que la cuerda fija deslice sobre éste en una dirección, quedándose bloqueada en la dirección contraria, y sujetándonos sobre ésta.
El nudo Remi es un nudo que se emplea en maniobras de autorrescate, ya que con tan solo dos mosquetones de seguridad HMS y sobre la cuerda fija, podremos ascender o descender por ella de manera segura. Este nudo parte de un nudo dinámico, el cual nos permite asegurar una cuerda o descender por ella de manera más o menos segura, ya que no bloquea de manera automática y necesita de atención y precisión durante su utilización. Recomendado siempre el uso de un guante para no abrasarnos las manos y así soltar la cuerda.
Realizaremos un nudo dinámico sobre un mosquetón de seguridad HMS, el cual tendremos en el anillo ventral como podemos ver en la imagen.
Para que el nudo quede de manera correcta debemos dar un paso a tras o descolgarnos un poquito, para así conseguir que el nudo pivote quede sobre el mosquetón. Este nudo tiene la particularidad de ser bidireccional en su uso, pudiendo emplearse en la dirección que quieras de la cuerda con solo pivotar sobre el mosquetón y colocarse de nuevo.
Una vez esté colocado el nudo dinámico cogeremos un mosquetón similar en tamaño y dimensiones para facilitar el manejo. Éste lo pasaremos por el nudo dinámico por el primer cote que se forma desde la cuerda fija como podemos ver en la imagen.
Pasándolo también por el anillo ventral y quedando contrapeado, con los cierres de los mosquetones en direcciones opuestas, aumentando la seguridad al evitar que la cuerda se salga durante la maniobra.
De esta manera el nudo dinámico solo desliza en una dirección y se queda totalmente bloqueado en la otra, ya que el mosquetón nuevo no permite que el nudo pivote en una nueva dirección.
En caso de vernos con la necesidad de rapelar, simplemente con quitar el mosquetón añadido nos permitirá bajar con un dinámico. Para hacer esta maniobra tendremos que colgarnos sobre el punto “A” del comienzo (nudo Bachman).
Maniobra con doble cuerda
Cuando tengamos que realizar la maniobra con doble cuerda, emplearemos éstas como si fuesen una sola en el punto “A” o Bachman, y en el punto “C” o inferior un reverso.
Si colocamos un reverso al anillo ventral, lo haremos como si lo estuviésemos utilizando en una reunión para asegurar a un segundo, ver imagen. El punto central será el anillo ventral y la cuerda fija, lo que sería el segundo escalador con su mosquetón de bloqueo. De esta manera la cuerda correrá en una sola dirección, y en caso de querer rapelar lo que tendríamos que hacer es cambiar los mosquetones de seguridad, el que está de bloqueo pasaría a ser el mosquetón de descenso. El que está de unión entre reverso y anillo ventral quedaría libre.
IMPORTANTE: Siempre que rapelemos con reverso o nudo dinámico conviene añadir un nudo de bloqueo, para así garantizar que nos detendremos en caso de soltar las cuerdas.
Si llevamos un Tibloc o micro-bloqueador, éste lo podemos utilizar tanto en el punto “A”, si no tenemos un cordino, como en el punto “C” si no disponemos de dos mosquetones de seguridad. Además de otras utilidades en caso de emergencia.
Cuando utilices un aparato al que no estés acostumbrado lee atentamente las instrucciones de uso.