El coronavirus alcanza los CIE con dos primeros positivos en Gran Canaria
Dos de los más de 70 internos de Barranco Seco, en Gran Canaria, han dado positivo por coronavirus. Se trata de los primeros migrantes contagiados en un CIE desde que estalló la crisis sanitaria. En Hoya Fría, Tenerife, un agente de la Policía Nacional también tuvo la enfermedad, pero no consta ningún interno afectado. Desde que se decretó el Estado de Alarma, la plataforma Canarias Libre de CIE ha insistido en que los migrantes encerrados en estos espacios sean puestos en libertad ante la imposibilidad de expulsarlos con el cierre de fronteras. Esta petición fue planteada también por el Defensor del Pueblo al vicepresidente portavoz de la Asociación de Abogados de Extranjería. Sin embargo, el Ministerio del Interior explicó a esta redacción que “no hay ninguna orden” respecto a las repatriaciones.
Los dos afectados tienen 20 años y presentan “un cuadro leve” y, por ello, el Servicio Canario de Salud recomienda su aislamiento dentro del propio establecimiento, tal y como adelantó RTVC. El juez de control de Barranco Seco, Arcadio Díaz Tejera, señaló en la televisión que “lo ideal sería tener un hotel donde poder aislar a cada uno de los internos en unas 70 habitaciones individuales, pero no contamos con ese recurso”. Por el momento, se ha apartado a los enfermos y también se están tomando precauciones con quienes mantenían mayor contacto con ellos.
En cada habitación del edificio duermen seis personas y, pese a haber estado más de un año en reformas y haberse invertido 1,5 millones de euros en su remodelación, la antigua prisión franquista sigue pareciendo “una cárcel de la dictadura”, de acuerdo con el auto emitido por Díaz Tejera en febrero tras dos visitas. “Las personas internas son consideradas de alto riesgo por su condición de hacinamiento. No podemos obviar las pésimas condiciones en las que se encuentran, ya que es imposible aplicar algunas de las medidas de prevención y seguridad que garanticen la propagación de la enfermedad y la salvaguarda de sus derechos”, subrayó Canarias Libre de CIE en un comunicado.
Las personas que han llegado por vía marítima a Canarias durante el Estado de Alarma no han sido trasladadas al CIE, sino que han pasado a ocupar plazas de acogida. Una de las peticiones de las organizaciones expertas en migraciones es que también las personas internas sean trasladadas a plazas de acogida, así como que quienes tengan familiares en el territorio nacional accedan a la reagrupación.
En estas dos semanas de confinamiento, han alcanzado las costas del Archipiélago más de 100 migrantes en cuatro embarcaciones distintas. Tres de ellas llegaron a Gran Canaria y una a Fuerteventura. El flujo de personas que han recibido las Islas este mes de marzo es menos intenso que el que venía recibiendo desde agosto de 2019. En los dos primeros meses de 2020, llegaron 1.181 personas en 40 pateras. Cruz Roja señala que el protocolo de primera asistencia sigue siendo el mismo, pero adoptando todas las medidas preventivas trasladadas por el Ministerio de Sanidad.
Dos de los más de 70 internos de Barranco Seco, en Gran Canaria, han dado positivo por coronavirus. Se trata de los primeros migrantes contagiados en un CIE desde que estalló la crisis sanitaria. En Hoya Fría, Tenerife, un agente de la Policía Nacional también tuvo la enfermedad, pero no consta ningún interno afectado. Desde que se decretó el Estado de Alarma, la plataforma Canarias Libre de CIE ha insistido en que los migrantes encerrados en estos espacios sean puestos en libertad ante la imposibilidad de expulsarlos con el cierre de fronteras. Esta petición fue planteada también por el Defensor del Pueblo al vicepresidente portavoz de la Asociación de Abogados de Extranjería. Sin embargo, el Ministerio del Interior explicó a esta redacción que “no hay ninguna orden” respecto a las repatriaciones.
Los dos afectados tienen 20 años y presentan “un cuadro leve” y, por ello, el Servicio Canario de Salud recomienda su aislamiento dentro del propio establecimiento, tal y como adelantó RTVC. El juez de control de Barranco Seco, Arcadio Díaz Tejera, señaló en la televisión que “lo ideal sería tener un hotel donde poder aislar a cada uno de los internos en unas 70 habitaciones individuales, pero no contamos con ese recurso”. Por el momento, se ha apartado a los enfermos y también se están tomando precauciones con quienes mantenían mayor contacto con ellos.