La sección cuarta de la Audiencia Provincial de Las Palmas ha anulado la junta de accionistas en la que fue reelegido Miguel Ángel Ramírez como presidente de la UD Las Palmas, al estimar la demanda interpuesta por Manuel García Navarro, su antecesor en el cargo.
Según informa este martes el periódico La Provincia, la juez María Elena Corral, ponente de la Sala, sentencia que la operación que acometió el Consejo de Administración de la UD Las Palmas en julio de 2005 para una ampliación de capital de 3,5 millones de euros fue irregular y que, por lo tanto, los accionistas que participaron en la junta en la que Ramírez renovó su mandato no pueden ser considerados como tal. La operación de ampliación fijaba como paso previo la reducción a cero del capital social de la empresa.
El club de Pío XII sólo logró cubrir 1,7 de los 3,5 millones de euros que puso en venta con la emisión de 37.640 acciones a un precio de 94 euros. La Sala recuerda que, según un acuerdo adoptado en la asamblea, si la suscripción no llegaba a la cantidad de 3,5 millones, la ampliación de capital quedaría sin efecto.
Por lo tanto, concluye que los antiguos accionistas, entre los que se encuentra el propio Manuel García Navarro, no han perdido sus derechos y siguen siendo accionistas.
La UD Las Palmas ya ha anunciado que presentará un recurso de apelación ante el Tribunal Supremo.