El Cádiz es el actual líder de Segunda y rival en la noche de este viernes de la UD Las Palmas. El equipo de Pepe Mel, en plena racha, llega al Ramón de Carranza dispuesto a parar los pies a un equipo que tiene una indudable conexión con el CD Tenerife.
Álvaro Cervera vive su cuarta temporada en Cádiz, ciudad a la que llegó tras dos años y medio en el banquillo del Heliodoro. En las dos plazas logró subir el equipo a Segunda A.
En la isla rozó la clasificación para la promoción, lo que sí consiguió en Cádiz. ¿Y quién se cruzó entonces en el camino del conjunto andaluz? Pues el CD Tenerife de José Luis Martí, que acabaría viendo frustrado su ascenso a manos del Getafe en la eliminatoria final de junio de 2017.
Cervera se llevó a su aventura a tierras andaluzas a Roberto Perera, su segundo en la Isla. Este es el hombre en la sombra. Es algo más que un ayudante, es el maniático de los informes, que llega a hacer incluso de forma individualizada.
Este pasado verano llegó a Cádiz el delantero Nano, al que Cercera hizo debutar en el CD Tenerife. También lo hizo Choco Lozano, delantero hondureño que jugó dos campañas de blanquiazul. El internacional dejó la Isla para jugar primero en el Barcelona B y luego en el Girona, con este último en Primera.
Volviendo a Cervera y a Nano, el estreno del canterano no fue el único “regalo” que dejó el técnico a la institución de la calle San Sebastián, pues también le dio continuidad a hombres de la casa como Alberto, Ayoze Pérez, el portero Roberto, Nano, Carlos Abad, Jorge o Cristo González.
La primera perla en ser traspasada fue Ayoze, que antes de explotar con 20 años pudo irse casi gratis al Espanyol que dirigía el mexicano Javier Aguirre. Álvaro paró esa operación y también se opuso a su marcha al Oporto, antes de que el Newcastle pagara los dos millones de euros recogidos en su cláusula de rescisión.
También dejó 3,2 millones de euros la venta al Éibar de Nano, al que Cervera hizo debutar con 18 años en un curso 13-14 en el que fue titular en las visitas a Ipurúa (1-2) o Las Palmas (1-0) en plena pelea por entrar en los 'playoffs'.
El curso siguiente, amén del citado Jorge, hoy en el Celta cedido por el Valencia tras pagar dos millones y medio de euros, se estrenó con 16 años –y marcó un gol con apenas 17– el punta Cristo González, traspasado al Castilla por 750.000 euros, hoy en el Huesca. En total, diez millones en traspasos.
Durante su estancia en la Isla, Cervera también hizo debutar y le dio continuidad a Alberto Jiménez y a Carlos Abad, titular con 19 años hasta que una grave lesión ante el Betis propició la urgente contratación de Dani Hernández para el puesto de portero.
Mención al margen merece el caso de Bruno González, central del Getafe al que Cervera dio cancha en la Isla: jugó 78 partidos en dos años... y se fue gratis al Betis, donde ascendió y se consolidó en la élite.
Cervera no ha perdido las mañas pues el Cádiz es un club que también ha ingresado casi trece millones de euros con las ventas de Aridane (Osasuna), Álvaro García (Rayo Vallecano) o Manu Vallejo (Valencia).