El debate está en la calle. Ni siquiera el hecho de haber sumado cuatro de los seis últimos puntos en juego ha conseguido evitar que el nivel de las críticas al juego del CD Tenerife vaya en aumento con el paso de los días.
El empate del pasado sabado en Vitoria, que en condiciones normales hubiera sido catalogado como muy valioso, ha sabido a poco en el entorno blanquiazul, sobre todo porque el Alavés se presentaba como víctima propiciatoria y el conjunto chicharrero no dio la sensación de poner toda la carne en el asador.
Incluso desde dentro del vestuario se apunta que el equipo ha podido pecar de falta de ambición y debería adoptar un talante más ofensivo como mejor alternativa para ganarse el respeto de los adversarios.
Así lo atestiguaba este martes Nino, el referente del CD Tenerife en la punta de ataque, al afirmar que “el equipo tiene ilusión, pero tiene debe tirar más hacia delante y así llegarán los resultados. Tenemos que ser más agresivos, que el los rivales vean que vamos a por ellos porque lo que está claro es es que en Segunda división manda mucho el respeto que te tengan”.
Profundizando un poco más si cabe en la cuestión, el jugador cedido por el Levante recomienda la terapia a seguir para sembrar el resquemor entre los adversarios. “Hay que empezar a meter más caña. Los equipos rivales nos tienen que respetar”, insistió, “y saber que 90 minutos contra el Tenerife se les pueden hacer muy cuesta arriba”.
Este domingo visita la isla el Córdoba, un contrincante que no le inspira la más mínima confianza al artillero tinerfeñista. “Es un equipo que acaba de ascender y que cuenta con jugadores con experiencia, lo que le convierte en un rival complicado, pero queremos ganar y hay que hacerlo por todos los medios”.