El nuevo proyecto del Kalise Gran Canaria, que ha sido forjado entre el técnico Salva Maldonado y el director deportivo Himar Ojeda, ha comenzado a entusiasmar en la Liga ACB tanto por su estilo de juego como por los resultados en el arranque de la fase regular, que tras cuatro partidos disputados sitúa al equipo amarillo en la cuarta plaza.
El sorteo del calendario fue poco propicio con el equipo amarillo ya que tuvo que descansar en la jornada inaugural, circunstancia que, por falta de ritmo de competición, creó ansiedad entre los componentes de la plantilla, a lo que se unió la inesperada baja, el día anterior, de Josh Fisher por enfermedad.
El gran beneficiado de ambos condicionantes fue el CAI Zaragoza, que llegó mucho más afinado a la segunda ronda liguera y, tras aguantar estoicamente las acometidas iniciales del conjunto insular, al final hizo valer sus mayores vivencias y la puesta a punto que logró con la Supercopa, en la que fue un anfitrión de lujo.
Lo más importante ha sido la capacidad de respuesta de los pupilos de Maldonado, quienes, con determinación, se conjuraron para revertir un rendimiento que llegó incluso a cuestionar la validez del proyecto deportivo, al que se incorporaban cinco jugadores con nulo o escaso protagonismo en la elite española.
En aquel momento, el técnico del Kalise dijo que confiaba en las capacidades de su equipo y recomendó el trabajo colectivo como mejor medicina ante la carencia de grandes referentes individuales.
Sus consejos fueron interpretados a la perfección en el feudo del Alta Gestión Fuenlabrada, en el que jugaron de menos a más para voltear el electrónico y adueñarse de un triunfo de gran carga anímica, que oxigenó la presión y dio alas a los sueños de batir por cuarto año consecutivo en la isla al Regal FC Barcelona.
En un choque adelantado al martes y con el público cómplice de las grandes citas, el Gran Canaria protagonizó otra histórica gesta ante los azulgrana, quienes perdieron el liderato en el Centro Insular de Deportes (CID) tras una exhibición defensiva de los anfitriones.
El descanso de la cuarta ronda fue aprovechado por el Kalise para jugar un encuentro amistoso con el Real Madrid, para completar su preparación en el arranque de temporada y, a pesar de la abismal diferencia de potencial, volvió a darse un baño de autoestima con otro merecido triunfo.
El equipo de Salva Maldonado tuvo ayer una auténtica reválida para sus aspiraciones de jugar la Copa del Rey con el tercer rival madrileño, el MMT Estudiantes, y, ante casi diez mil espectadores, volvió a dar una exhibición en las dos pinturas, con una defensa muy efectiva y un ataque de ensueño. El 66-88 premió el derroche del “Granca” y le mantiene como invicto en los desplazamientos.
Con tres victorias consecutivas, el Kalise está a sólo un paso de igualar la mejor racha del pasado curso, cuando consiguió superar entre la jornada 24 y 27 al Granada, Manresa, Fuenlabrada y Valladolid.
Los dos próximos encuentros del Gran Canaria se jugarán en el CID, primero ante el ViveMenorca y después con el Unicaja, y los isleños volverán a disponer de los factores cancha y afición para alargar un poco más su presencia en las posiciones relevantes del campeonato.
Maldonado y todo el cuadro técnico alertan del peligro de la euforia, y apelan al trabajo constante del día a día, a la humildad en la asimilación del éxito y a la sed de triunfos para seguir creciendo como colectivo, única fórmula para regresar a las eliminatorias por el título de la ACB.