El tenista español Rafael Nadal ha conseguido comenzar con buen pie su andadura en la Copa de Maestros, que se está disputando en el O2 Arena de Londres, tras doblegar (3-6, 7-6(5) y 6-4) en un partido que se ha alargado hasta las dos horas y 33 minutos.
El balear, que afronta esta semana su último gran reto para completar un palmarés de leyenda, ha conseguido lavar su mala imagen del primer set, en el que se mostró irreconocible, para acabar resurgiendo y apuntarse su primera victoria en el Grupo 'A' del torneo.
Durante el primer parcial, el español se vio superado en todo momento por el ciclón norteamericano. El de Nebraska impuso su estilo y apoyado en su espectacular servicio dominó a Nadal, al que se le puso muy cuesta arriba el choque cuando desaprovechó tres bolas de 'break' en el quinto juego.
Muy sólido con su saque, Roddick se limitó a mantener a raya al balear, del que no se vio su mejor versión. La primera raqueta mundial alternaba goles de gran calidad con errores no forzados que hicieron más fácil los primeros tramos para su rival, que se adelantó con un claro 6-3 en el primer capítulo.
Pero todo cambió en el segundo. A pesar de encontrarse con un tempranero 'break' en contra, el manacaorí se levantó y tiró de la fortaleza mental que le ha llevado hasta la cima. En el cuarto juego, recuperó la desventaja y por fin se vio un gesto de rabia que significaba que algo estaba cambiando.
El español retomó su mejor juego desde el fondo de la pista -Roddick le había ganado un eterno peloteo anteriormente- y comenzó ha mostrarse más seguro con su derecha, aunque en el resto todavía no encontraba la tecla para desarmar el potente brazo de su rival, que esperaba impaciente la muerte súbita.
Con ambos jugadores solventando con facilidad su servicio, se llegó a un tie break con grandes alternativas. Nadal superó dos puntos seguidos de su rival y emergió sobre la pista el gran campeón. Un 'passing shot' marca de la casa y un saque directo allanaron el camino de la igualada, que se acabó consumando con un error del estadounidense.
En el tercer y definitivo set, el español consiguió dar un golpe de efecto en el quinto juego cuando rompió el saque de su rival por segunda vez en el partido y consolidó el mismo en el siguiente juego, no sin sufrimiento.
Con el partido más que encarrilado, Nadal supo mantener la cabeza fría y asegurarse el triunfo desde el servicio. Por su parte, Roddick se aceleró y volvió a sucumbir ante el mallorquín, algo que ha hecho en seis de las nueves veces que se han enfrentado.
Con esta victoria, Nadal, que no competía desde Shangai, demuestra que ha vuelto en gran forma y empieza con paso firme su andadura en la capital británica. Djokovic y Berdich son los próximos rivales en el cuadro y están en el punto de mira del número uno mundial, que quiere cerrar un año mágico con este título.