El nuevo triunfo de Valentino Rossi (Yamaha) en la República Checa, el segundo consecutivo y el quinto de la temporada, ha dejado el mundial de MotoGP prácticamente en bandeja para el italiano, que está en condiciones, con una ventaja de cincuenta puntos respecto de Casey Stoner (Ducati), de atacar su octavo cetro mundial, el sexto en la máxima categoría.
Después de dos años en blanco, con el título en manos de Nicky Hayden y Casey Stoner, Rossi regresa por su fueros y vuelve a ser el más grande sobre la pista, justo en un momento que sólo tiene como rival al australiano, quien, para su desgracia, se salió hoy de la pista y debió abandonar. Y poca cosa más, porque Jorge Lorenzo (Yamaha) y Dani Pedrosa (Honda) se encuentran inmersos en un pozo de difícil salida.
Este pozo en el caso de los neumáticos Michelin, que tanto dieron que hablar en Laguna Seca y cuyas soluciones han reinado por su ausencia en Brno, hasta el punto de que Pedrosa se ha atrevido hoy a señalar a los responsables de la casa francesa de “no querer ver que hay un problema” y de “arrogantes”.
Este domingo en el circuito de Brno (donde se han citado 146.133 espectadores, según datos facilitados por la organización), la 'maldición de los Michelin' ha vivido un nuevo capítulo, quizá más cruel, ya que todo un piloto como Pedrosa ha estado a punto de acabar último. Lorenzo, de hecho, salió último desde la 'pole'.
La cuestión Michelin se trata de un problema de adherencia del neumático delantero, que hace poco menos que poco competitiva la motocicleta, especialmente cuando negocia las curvas. Pedrosa y Lorenzo, como pilotos más destacados que calzan este neumáticos, son a la postre los más perjudicados.
Ante esta expectativa, el panorama está bastante definido; ya que no se espera una reacción relámpago de Michelin, Rossi podrá administrar a sus anchas los 50 puntos que tiene de ventaja ante el único adversario que le queda, Stoner, a la espera de que éste plantee batalla hasta el último suspiro.
Al margen de la liga en la que Rossi y Stoner son claramente superiores, queda un segundo nivel donde las Kawasaki de Anthony West y John Hopkins, así como las Suzuki de Loris Capirosi Chris Vermeulen, intentarán dar la guerra necesaria para entrar en el podio, como ha pasado en las últimas carreras, y también en Brno, donde el italiano subió al tercer lugar.
Una situación muy diferente es la que vive el catalán Toni Elías (Ducati), quien con el agua al cuello es cuando más y mejor responde ante la adversidad. En Brno, el piloto sacó lo mejor de sí, y lo que le permitió su moto, y después una sensacional remontada le catapultó a la segunda posición.
Con este lugar en el podio, el de Manresa vislumbra con otro ánimo la próximo temporada en la que, tras la carrera de hoy, ha garantizado que le gustaría continuar en el MotoGP y no en Superbikes, como se ha estado rumoreando en el 'paddock' de Brno.
La carrera del MotoGP en la República Checa deja una reunión muy importante entre todos los pilotos, a excepción de Nicky Hayden, que no participó en la carrera por un accidente que padeció en Los Ángeles. Los pilotos hablaron con los responsables de Dorna de medidas de seguridad, cambios para la temporada que viene y se suscribió la idea, aún sin concretar, de aspirar para la temporada que viene de un mundial con un solo distribuidor de neumáticos.
En los 250 cc viven muy alejados de las cuestiones que desestabilizan y azotan el MotoGP. En la carrera en Brno, se vivió un gran final que anima el mundial después de que el italiano Marco Simoncelli (Gilera) fuese desbordado por un Álex Debón (Aprilia) y un Álvaro Bautista (Aprilia) que cuajaron un final espectacular.
Simoncelli lo tenía todo: la 'pole', la inercia de las últimas carreras y la suerte de cara, la misma que se le giró al poco del final cuando tenía en sus manos la tercera victoria de la temporada. No fue así, y Debón realizó el adelantamiento del fin de semana y se coló primero y, tras él, un Bautista que también subió al podio.
Simoncelli amplía a veinticuatro puntos de ventaja respecto al segundo, Mika Kallio, que sólo pudo ser quinto, tras otro español, Héctor Barberá, quien no llegó a tiempo para la lucha por la victoria y acabó cuarto.
El 125 cc, la categoría del octavo de litro generó un nuevo ganador, el alemán Stefan Bradl (Aprilia), quien se estrenó en lo alto del podio en toda su carrera.
Bradl tuvo una carrera cómoda y sólo en las últimas vueltas se vio acechado, aunque sin agobios, por el líder del mundial, el francés Mike di Meglio (Derbi). El tercero fue el español Joan Olivé (Derbi), que vivió una pugna muy espectacular con el húngaro Gabor Talmacsi (Aprilia), vigente campeón del mundo de la cilindrada.
A falta de seis carreras, el mundial en los 125 cc también empieza a decantarse para Di Meglio quien, con 186 puntos, tiene un colchón de puntos respecto a Simone Corsi (44 puntos), con el que puede afrontar las próximas citas sin mucha tensión.
La próxima carrera del mundial en las tres cilindradas se disputará en el circuito de Misano, correspondiente al GP de San Marino, dentro de dos fines de semanas, antes de que el circo del motociclismo emprenda un largo viaje a los Estados Unidos, a Asia y Australia, para concluir en Valencia en octubre.