La Empresa Mixta de Aguas de Las Palmas (EMALSA) ha reducido las emisiones de CO2 derivadas del ciclo integral del agua en un 99% desde 2019. Esto es así debido a las inversiones que han permitido reducir el consumo energético de planta desaladora de Las Palmas III y a la adquisición por parte de la compañía de energía con Certificados de Garantías de Origen de Energía Renovable. Esto último quiere decir, que todas las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) asociadas al consumo de electricidad de EMALSA están siendo neutralizadas mediante la compra de Certificados de Garantías de Origen de Energía Renovable (GdO). Con estos certificados de origen, EMALSA asegura que la misma electricidad que consume en sus instalaciones y procesos se produce en algún otro lugar de Canarias y/o España a partir de fuentes de energía renovable.
A día de hoy, el 100% de la energía eléctrica consumida por EMALSA tiene acreditación de Garantía de Origen Renovable. La empresa redujo su huella de carbono de 48.153 toneladas de CO2, en 2019, a 352 toneladas, en 2023. Sólo en el pasado año, las acciones llevadas a cabo en materia de recuperación de energía y ahorro energético le permitieron evitar la emisión de 602 toneladas de CO2 a la atmósfera. Desde 2022, EMALSA ha invertido 5,7 millones de euros en la desaladora para reducir en 11 millones de kWh el consumo energético anual y así rebajar en unas 13.000 toneladas las emisiones de dióxido de carbono.
Las emisiones asociadas a la actividad de EMALSA se pueden dividir en dos grupos: las llamadas de Alcance 1, originadas directamente por su actividad y por su consumo de combustibles, y las de Alcance 2, relativas a su consumo eléctrico. Estos cálculos se han realizado según la última versión de las herramientas del GHG Protocol (protocolo de Gases de Efecto Invernadero, por sus siglas en inglés).