Espacio de opinión de Canarias Ahora
El aborto y los herejes
¿Alguien ve alguna diferencia entre las amenazas habituales de muchos imanes en países musulmanes y la rueda de prensa del portavoz de la Conferencia Episcopal Española donde Martínez Camino amenazó con la excomunión a los diputados que hoy van a votar a favor la reforma de la ley del aborto, según Camino esos diputados, a los que calificó de “herejes”, están en “situación objetiva de pecado mortal y no puede ser admitidos en la comunión”. Lo que hoy se vota es la reforma de la primera ley del aborto del año 1985. Con aquella ley, sin tocarla, anularla ni darle brillo ni esplendor, gobernó José María Aznar durante 8 años. Se produjeron 500.000 abortos y ningún diputado del PP fue excomulgado.
Tampoco excomulgaron los obispos a sus antiguos empleados en la Cope, los locutores Jiménez Losantos y César Vídal, o al actual jefe de Informativos, Nacho Villa, cuando estuvieron defendiendo la guerra de Irak en contra de los criterios del Papa Juan Pablo II. Tampoco se le ve intención a la jerarquía católica de excomulgar a la infanta Elena de Borbón y a Jaime de Marichalar, que fueron casados en su día por los jefes de los obispos y ahora viven separados, faltando a su deber del sacramento del matrimonio. Al contrario, parece que ya está decidido concederle la nulidad del matrimonio, un privilegio que suele estar destinado sólo a los matrimonios de nobles apellidos o millonarias cuentas corrientes.
El PP defenderá hoy en el Congreso de los diputados los postulados de esta jerarquía eclesiástica fundamentalista que no excomulga a los explotadores, ni a los banqueros, ni a los que hacen las guerras, ni a los que venden las armas. No excomulgan a los curas violadores y pederastas. Tampoco excomulga a los meapilas del Opus Dei que funcionan como una secta. Esos que aman tanto la vida nos deberían de explicar si prefieren a un niño infeliz, en casa de madres que no han dejado de ser niñas, en manos de padres que no han llegado a ser hombres, si prefieren que una muchacha violada recuerde su experiencia violenta toda la vida, si prefieren la situación anterior a 1985: jóvenes que morían en abortos clandestinos o mujeres de familia bien abortando en Londres.
Si los obispos siguen adelante con su amenaza y excomulgan a todos los que apoyen hoy la nueva ley del aborto, y si, en un ataque repentino de coherencia, excomulgan a los diputados del PP por haber gobernado 8 años con una ley que permitió medio millón de abortos. ¿Entonces qué diputados quedarán en el Congreso con derecho a ir a misa y comulgar? Pues quizás sólo queden Ana Oramas y José Luis Perestelo. Coalición Canaria no quiso desvelar ayer el sentido de su voto y sus dos diputados han renunciado al turno de hoy para explicarlo. Una vez más, CC poniendo una velita a dios y otra al diablo, nadando en las aguas de la ambigüedad. Debemos perdonarlos. Después de 20 años en el machito, pecando contra todos nosotros, por lo menos hoy intentarán salvar sus almas. Amén.
Otros artículos en el blog Somos Nadie
Juan GarcÃa Luján
¿Alguien ve alguna diferencia entre las amenazas habituales de muchos imanes en países musulmanes y la rueda de prensa del portavoz de la Conferencia Episcopal Española donde Martínez Camino amenazó con la excomunión a los diputados que hoy van a votar a favor la reforma de la ley del aborto, según Camino esos diputados, a los que calificó de “herejes”, están en “situación objetiva de pecado mortal y no puede ser admitidos en la comunión”. Lo que hoy se vota es la reforma de la primera ley del aborto del año 1985. Con aquella ley, sin tocarla, anularla ni darle brillo ni esplendor, gobernó José María Aznar durante 8 años. Se produjeron 500.000 abortos y ningún diputado del PP fue excomulgado.
Tampoco excomulgaron los obispos a sus antiguos empleados en la Cope, los locutores Jiménez Losantos y César Vídal, o al actual jefe de Informativos, Nacho Villa, cuando estuvieron defendiendo la guerra de Irak en contra de los criterios del Papa Juan Pablo II. Tampoco se le ve intención a la jerarquía católica de excomulgar a la infanta Elena de Borbón y a Jaime de Marichalar, que fueron casados en su día por los jefes de los obispos y ahora viven separados, faltando a su deber del sacramento del matrimonio. Al contrario, parece que ya está decidido concederle la nulidad del matrimonio, un privilegio que suele estar destinado sólo a los matrimonios de nobles apellidos o millonarias cuentas corrientes.