Indefensión

Un ejemplo evidente es la indefensión en la misma cotidianidad ciudadana, excluyo de la misma los salmones, los faisanes, las góndolas, Tindayas, Eólicos y Dimas y diretes?por recurrentes y hasta normales tal anda la política en Canarias.

Me refiero a las pequeñas putaditas que sacan de sus casillas a la ciudadanía por lo menos cuando a alguien le toca, creyendo sentirse libre de los atropellos de las instituciones. Viene a ser como aquel poema de Martin Niemüller (atribuido a Breht) : “?.y cuando vinieron a por mi ,ya no quedaba nadie para protestar”.

Por poner varios ejemplos recientes, tenemos las comisiones que cobran los policías por poner multas ; por otro, las denuncias voluntarias de tráfico, y quien sabe que más, que puede hacer cualquier ciudadano contra otro, requiriendo a un policía, que firma, y que luego el departamento de multas del ayuntamiento previo informe del cartero de que en el domicilio no hay nadie o no consta tal dirección etc., te endilga la multa; que sea mentira da igual a los efectos, porque al que le embargan la cuenta por no leerse los boletines oficiales, algo muy común, ha quedado en una situación de indefensión inaceptable en un estado que se dice democrático. Es la dictadura de la burocracia que está por encima de cualquier norma emanada del parlamento, simplemente porque ésta no se ha cribado en base a la evolución democrática. Es lo que permite los reinos de taifas dentro del funcionariado, los chanchullos en las oposiciones, la asignación de una licencia de obras, o que se permita a los banco ayudados con dinero público a pesar de haber provocado la crisis en gran medida jugar al tinmarindedospingüé con las subidas del diferencial en préstamos e hipotecas para compensar la bajada del euribor o poniendo cláusulas abusivas. Y todas las que usted quiera añadir.

En síntesis, lo que se está diciendo es que denuncie usted, que le va a salir carito, lento y pernicioso para la salud, y de paso sirva de elemento de transmisión para seguir manteniendo el mismo sistema putrefacto y la legión de vividores que se alimentan de él.

¿Que le queda a una persona cuando ese ve pisoteada, ninguneada, chuleada?,indefensa ante la administración después de haber recorrido kilómetros haciendo gestiones, rellenando papalitos por un tubo, perdiendo horas de su trabajo o simplemente no poder pagar ese viaje a tu hijo que tanta ilusión le hacía, porque un desgraciado con influencias, un funcionario inepto o los responsables de haber evitado estas situaciones no están o no contestan?. Si lo que piensa es lo que supongo, por su bien no lo haga, les haría un favor.

Kiko García

Un ejemplo evidente es la indefensión en la misma cotidianidad ciudadana, excluyo de la misma los salmones, los faisanes, las góndolas, Tindayas, Eólicos y Dimas y diretes?por recurrentes y hasta normales tal anda la política en Canarias.

Me refiero a las pequeñas putaditas que sacan de sus casillas a la ciudadanía por lo menos cuando a alguien le toca, creyendo sentirse libre de los atropellos de las instituciones. Viene a ser como aquel poema de Martin Niemüller (atribuido a Breht) : “?.y cuando vinieron a por mi ,ya no quedaba nadie para protestar”.