Espacio de opinión de Canarias Ahora
La independencia
Como los cabildos poco pueden hacer ya que, al no tener recaudación propia, dependen de lo que el Gobierno tenga a bien darles, recaerá sobre los ayuntamientos todo el peso de las prestaciones y de las demandas vecinales. Y todavía hay quienes se preguntan qué quiso decir José Miguel Pérez al solicitar una nueva ley de Cabildos para acabar con la “centralización autonómica”; la que se manifiesta incluso en asuntos menores, como la retransmisión televisiva blanquiazulada a tope del derbi coñazo.
Agrava la situación el descenso de las recaudaciones del REF de las que, para más inri, los ayuntamientos no han cobrado aún las cantidades correspondientes a los años 2004 y 2007.
Será por eso, por falta de dinero, que sigue Paulino adelante con la Policía autonómica y mantiene a Rita Martín “promocionando” el turismo. En lo que tolera que Soria se dedique cuasi full time a buscar las facturas de sus vacaciones y a Berriel a darle el pistoletazo de salida a los especuladores del suelo para acabar de destruir lo que queda. Da idea de la ineptitud incluso conceptual de Paulino su intervención del otro día, cuando señaló a La Palma como referencia del modelo económico canario. Lo que es apostar por vivir de subvenciones. Porque, que yo sepa y salvo que se demuestre lo contrario, la economía palmera se basa en una agricultura fuertemente subvencionada que no ha conseguido diversificarse y que por eso ha perdido población en los últimos años.
Ha sido necesario, por otro lado, que las islas aparezcan con el mayor índice de paro entre las comunidades autónomas para que Jorge Rodríguez, consejero por la gracia de Dios (aunque más que gracia, parezca broma), admita que no será posible en 2013 el pleno empleo que nos tenía prometido hasta antier mismo.
Con este escenario desastroso de fondo, Paulino acudirá a La Moncloa esta misma semana, creo. Abordará entre otras cosas, a lo que parece, la necesidad de reformar la Constitución. No sabe, por lo visto, que sin acuerdo con el PP no habrá reforma de modo que es inútil hablar ahora del asunto. Y si lo sabe, peor porque cree que nosotros no lo sabemos y sólo busca un titular como hombre de Estado. Aunque, quién sabe, a lo mejor esa petición es un primer paso hacia la independencia de Canarias tal y cómo la plantea El Día.
Ya saben que el matutino tinerfeño considera la independencia la única solución y que con ella saldría echando leches la crisis, se acabaría del mismo plumazo con el peligro marroquí y se convertirían las islas en la nación más rica de la galaxia al quedarse aquí los cuartos que se maman ahora los españoles y pasar los isleños a controlar sus inmensas riquezas sin mezcla de globalidad alguna. Cuasi textual, oye. Terminaría también la inicua persecución a patriotas como Miguel Zerolo y qué sé yo. El único obstáculo a tanta felicidad es, cómo no, Gran Canaria, que calza las botas del colonialismo español y conspira a su favor desde el Sanedrín de Vegueta.
Lleva El Día meses con esa matraquilla calificando de sicarios, traidores, perros de la ira y otras lindezas a quienes no estén por la labor, es decir, a los canariones y a sus “caballos de Troya” en Tenerife, que son cuantos no estén de acuerdo con sus editoriales. Una fauna que engloba a periodistas, abogados fracasados, profesores universitarios mediocres, intelectuales de medio pelo y qué sé yo cuantos condenados a las tinieblas exteriores, lejos de la luminosidad que irradia el chafardero. Para el periódico Paulino está llamado a ser el primer presidente de la República canaria y quiere que comience a comportarse como tal. Por eso digo que igual vapor ahí la reforma constitucional.
José Fco. Fernández Belda
Como los cabildos poco pueden hacer ya que, al no tener recaudación propia, dependen de lo que el Gobierno tenga a bien darles, recaerá sobre los ayuntamientos todo el peso de las prestaciones y de las demandas vecinales. Y todavía hay quienes se preguntan qué quiso decir José Miguel Pérez al solicitar una nueva ley de Cabildos para acabar con la “centralización autonómica”; la que se manifiesta incluso en asuntos menores, como la retransmisión televisiva blanquiazulada a tope del derbi coñazo.
Agrava la situación el descenso de las recaudaciones del REF de las que, para más inri, los ayuntamientos no han cobrado aún las cantidades correspondientes a los años 2004 y 2007.