Espacio de opinión de Canarias Ahora
Nuevo Gobierno, viejas políticas
El giro progresista decidido en las urnas el pasado 24M en Canarias no se va a trasladar a su Gobierno, que repite la fórmula de la pasada legislatura con distintos protagonistas. Pretenden obviar que las fuerzas conservadoras han perdido más de 180.000 votos mientras las progresistas crecían en 140.000. El Ejecutivo CC-PSOE modifica liderazgos pero, de forma continuista, repite fracasadas políticas y, también, modos de actuar escasamente democráticos.
El primer episodio, la constitución de los órganos del Parlamento, no ha podido ser más penoso y autoritario. CC y PSOE han copado el 80% de los miembros de la Mesa de la Cámara, cuatro de cinco plazas, cuando representan sólo el 37% del voto, dejando al PP con la quinta plaza y excluyendo a Podemos y a Nueva Canarias (NC), al 25% del electorado. El segundo, el anuncio del bloqueo de la iniciativa para crear una comisión de estudio sobre la reforma electoral, planteada por grupos que representan a más de 400.000 votantes, muy por encima de los que aglutinan los que apoyan el pacto de Gobierno.
Además, el documento ratificado por los máximos dirigentes de CC y PSOE (Pacto por el crecimiento y el progreso social y económico de Canarias) incide en esa dirección de continuismo con las políticas de anteriores gobiernos. El texto deja importantes dudas sobre asuntos muy relevantes. Entre ellos, el nivel de protección del suelo y del medio ambiente, la falta de concreción en las políticas económicas –continuistas y sin alternativas que contribuyan al crecimiento y a la generación de empleo- o la financiación autonómica.
Incluye generalidades sobre otros: planes contra la pobreza y la exclusión, acciones de estímulo del empleo o actuaciones en los servicios públicos. Y no se compromete sobre la imprescindible reforma del sistema electoral canario.
Apuntaré aquí algunos aspectos que NC considera fundamentales en la acción de Gobierno en la actual situación de Canarias. Asuntos determinantes si se pretende modificar la política económica, avanzar en el desarrollo sostenible y el empleo o afrontar la elevada pobreza; así como impulsar los deteriorados servicios públicos, apostar por las energías renovables, mejorar la calidad democrática y defender los derechos de Canarias ante el Gobierno central.
Empleo
Nueva Canarias apuesta por una política dirigida a estimular la demanda, impulsar la inversión desde las administraciones públicas, incrementar el gasto social, favorecer la circulación del crédito… para generar empleo de calidad a través del impulso a la economía productiva.
Consideramos imprescindible establecer como prioridad la lucha por el empleo y contra la pobreza en las Islas, así como actuaciones frente al drama de los desahucios. Con planes específicos coordinados entre las distintas administraciones. Y el establecimiento de una renta básica para aquellas familias que no tienen ningún tipo de ingresos.
Pero este cambio de la acción política es imposible si no obtenemos los recursos para impulsar la financiación de las grandes obras y servicios públicos o de las políticas estratégicas que son determinantes para ayudar a recuperar el crecimiento económico y el empleo. Lo que exige más ingresos fiscales, así como una justa financiación autonómica, el cumplimiento del REF económico y un trato justo en los Presupuestos Generales del Estado.
Por otra parte, las políticas de austeridad han deteriorado gravemente los servicios públicos. De ellos se han detraído cientos de millones de euros en los distintos presupuestos canarios de las dos últimas legislaturas. Perdiendo recursos humanos, dificultando la tarea de sus trabajadores, paralizando infraestructuras y reduciendo la calidad del servicio.
Revertir la actual situación no es fácil. Y no se conseguirá de manera inmediata. Eso sí, no lo hará nunca si no se plantea como una prioridad ir recuperando progresivamente los presupuestos perdidos, el personal eliminado y no sustituido, así como sus derechos. Y el documento del pacto incluye muchas vaguedades al respecto. Ocurre en educación, donde se burla la ley canaria y se establece una promesa de crecimiento presupuestario (“hasta alcanzar la media europea”) sin establecer un tiempo.
Sanidad
Ocurre en sanidad, en la que es prioritario implementar un plan de salud con suficiente ficha financiera, debatido y consensuado entre los profesionales, las organizaciones de usuarios y las formaciones políticas; así como un plan de urgencias dimensionado y un plan de obras y equipamientos que complete la red de Centros de Salud, finalice los hospitales en construcción y revise y actualice los equipamientos. Desarrollando, además, una estrategia intensiva de lucha contra las listas de espera.
Otros déficit del programa son la falta de propuestas coherentes para avanzar hacia un modelo de turismo sostenible, para afrontar con recursos la renovación de las ciudades turísticas o para diferenciar el destino Canarias. Así como el empeño en continuar con la intención de implantar el gas, lo que inevitablemente retrasará aún más el crecimiento de las energías renovables.
Este programa de Gobierno CC-PSOE también se desmarca de la demanda mayoritaria de mejoras democráticas en nuestra Comunidad. Frente a la política mordaza de PSOE y CC seguiremos defendiendo una profunda modificación del sistema electoral canario, que posibilite el acceso de formaciones políticas con suficiente apoyo social, y que además equilibre la sesgada representación de los territorios para que los ciudadanos y las ciudadanas estén mejor representados en la Cámara.
Nos encontramos ante un nuevo Gobierno con viejas políticas y un programa que no aborda con rigor ni voluntad transformadora los grandes problemas de la sociedad canaria. Un continuismo que no responde a lo expresado el 24M en las urnas y que nada bueno augura para el presente y futuro de Canarias.
El giro progresista decidido en las urnas el pasado 24M en Canarias no se va a trasladar a su Gobierno, que repite la fórmula de la pasada legislatura con distintos protagonistas. Pretenden obviar que las fuerzas conservadoras han perdido más de 180.000 votos mientras las progresistas crecían en 140.000. El Ejecutivo CC-PSOE modifica liderazgos pero, de forma continuista, repite fracasadas políticas y, también, modos de actuar escasamente democráticos.
El primer episodio, la constitución de los órganos del Parlamento, no ha podido ser más penoso y autoritario. CC y PSOE han copado el 80% de los miembros de la Mesa de la Cámara, cuatro de cinco plazas, cuando representan sólo el 37% del voto, dejando al PP con la quinta plaza y excluyendo a Podemos y a Nueva Canarias (NC), al 25% del electorado. El segundo, el anuncio del bloqueo de la iniciativa para crear una comisión de estudio sobre la reforma electoral, planteada por grupos que representan a más de 400.000 votantes, muy por encima de los que aglutinan los que apoyan el pacto de Gobierno.