El patrimonio de nuestros políticos

Pero yo me quedo con la propuesta del candidato de Iniciativa per Catalunya. Joan Herrera pidió a todos los candidatos que hagan público su patrimonio, y él mismo contó sus propiedades. Vive en una casa por la que paga una hipoteca con su pareja, además tiene un coche y dos bicicletas. En su cuenta corriente tiene un saldo de 7000 euros. Los otros candidatos pobres son Joan Puigcercós, de Ezquerra Republicana, que dice que tiene un piso de segunda mano, con una hipoteca por la que paga 700 euros al mes, un coche y el sueldo de presidente de grupo parlamentario, del que entrega entre el 20% y el 30% al partido.

También vive ajustadillo el candidato de Ciudadans, Albert Rivera, que posee el 50% de un piso de 60 metros cuadrados con una hipoteca de 150.000 euros cuyo pago comparte. No sabemos si es pobre o rica la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, no quiso decir cuánto cuesta la hipoteca de su piso en Barcelona, no tiene ni vehículo ni inversiones. Dijo que el saldo medio en su cuenta ronda los 4.000 euros, pero no especificó su sueldo o si tiene otras cuentas.

Los candidatos con más opciones a ganar las elecciones son los más ricos. Artur Mas, candidato de CiU, cuenta con un piso valorado en 180.000 euros -que acabó de pagar en 2008- y 322.000 euros en líquido ( 110.000 en planes de pensiones; 70.000 en cuentas; 100.000 en inversiones a largo plazo y 42.000 euros en bolsa) .José Montilla sorprendió al público porque contó que no tiene ni casa ni coche a su nombre, pero posee un patrimonio de 365.000 euros. Sus bienes están en la banca: planes de pensiones por valor de 87.516 euros, 13.000 euros en repartidos en varias cuentas corrientes y también comprende participaciones en fondos de inversión y de otros activos financieros por 265.000 euros. En total 365.516 euros.

Resulta curioso que los partidos más votados en Cataluña tengan a unos candidatos que intentan ganar dinero en la economía de casino: en fondos de inversión y activos financieros. Son los mismos partidos, junto al PP, que nos quieren sacar de la crisis con las recetas de los recortes de gastos sociales y que están promoviendo el debate del futuro de las pensiones públicas. Ellos, por si acaso, ya tienen una pasta tremenda en la banca para disfrutar de la jubilación.

Sería bueno que en las próximas elecciones los candidatos canarios publiquen su patrimonio. Me gustaría saber cómo le ha ido a Paulino Rivero después de tantos años dedicado al servicio público, después de renunciar al sueldo de maestro escuela para trabajar por todos nosotros. Sería maravilloso conocer cómo están esas cuentas corrientes de PP Manolo, sin apenas dinero porque el hombre lo lleva todo en el bolsillo. Cómo será el patrimonio de este señor que dijo una vez a un juez que ha perdido más de un millón de euros por renunciar a su profesión para darnos cosas tan propias del interés general como las torres de canódromos, los solares en Pavía, membranas en Isolux, almacenes en La Favorita y molinos de viento suecos que seguimos esperando.

Que nos cuente José Miguel Pérez cómo le va después de renunciar su sueldo de profesor universitario y pasar el mismo tiempo en la oposición que en el gobierno. O Román Rodríguez qué tal va ese patrimonio del hombre que renunció a su liderazgo en el sindicato médico para construirnos el Hospital Negrín o montarnos un tren que corre un montón. Si salimos de la isla no quiero olvidarme de Miguel Zerolo ¿cuánto dinero debe tener este hombre que ahorra tanto en comidas y que tiene una suerte inmensa jugando a la lotería? Ahhhh... En mayo preguntaremos.

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Juan García Luján

Pero yo me quedo con la propuesta del candidato de Iniciativa per Catalunya. Joan Herrera pidió a todos los candidatos que hagan público su patrimonio, y él mismo contó sus propiedades. Vive en una casa por la que paga una hipoteca con su pareja, además tiene un coche y dos bicicletas. En su cuenta corriente tiene un saldo de 7000 euros. Los otros candidatos pobres son Joan Puigcercós, de Ezquerra Republicana, que dice que tiene un piso de segunda mano, con una hipoteca por la que paga 700 euros al mes, un coche y el sueldo de presidente de grupo parlamentario, del que entrega entre el 20% y el 30% al partido.

También vive ajustadillo el candidato de Ciudadans, Albert Rivera, que posee el 50% de un piso de 60 metros cuadrados con una hipoteca de 150.000 euros cuyo pago comparte. No sabemos si es pobre o rica la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, no quiso decir cuánto cuesta la hipoteca de su piso en Barcelona, no tiene ni vehículo ni inversiones. Dijo que el saldo medio en su cuenta ronda los 4.000 euros, pero no especificó su sueldo o si tiene otras cuentas.