Adán busca una salida

Dicen los sabuesos expertos en carne de destitución que a Arnáiz le quedan menos de dos afeitadas, lo que ya debe sonar a inminente si se tiene en cuenta que el que tiene que tomar la decisión es el mismísimo Adán Martín en persona. Así es. No hagan caso a las cosas que diga Antonio Castro Cordobez, portavoz del Gobierno, porque no sólo no le cuentan nada sino que, además, él no quiere ni enterarse. Dice a quien le pregunta que no tiene constancia oficial o documental alguna de las demandas de Fomento a Arnáiz, ni de Europa, ni nada de nada. El asunto lo ha puesto el presidente en manos de su hombre de máxima confianza, Miguel Becerra, que ya ha celebrado reuniones para tratar de encontrar una salida que no deje muchos cadáveres en el camino. Bueno, que sólo deje uno, el de Arnáiz.

Dicen los sabuesos expertos en carne de destitución que a Arnáiz le quedan menos de dos afeitadas, lo que ya debe sonar a inminente si se tiene en cuenta que el que tiene que tomar la decisión es el mismísimo Adán Martín en persona. Así es. No hagan caso a las cosas que diga Antonio Castro Cordobez, portavoz del Gobierno, porque no sólo no le cuentan nada sino que, además, él no quiere ni enterarse. Dice a quien le pregunta que no tiene constancia oficial o documental alguna de las demandas de Fomento a Arnáiz, ni de Europa, ni nada de nada. El asunto lo ha puesto el presidente en manos de su hombre de máxima confianza, Miguel Becerra, que ya ha celebrado reuniones para tratar de encontrar una salida que no deje muchos cadáveres en el camino. Bueno, que sólo deje uno, el de Arnáiz.