La alcaldesa pasa

Nada que hacer. Ya lo advirtió José Manuel Soria cuando sentaba sus reales, a ras del populacho, en la Alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria: ni un duro para la UD Las Palmas. Y lo repite con su estilo característico la actual alcaldesa, Josefa Luzardo, que además no se corta un pelo. Posiblemente sea que aprendió los gestos de su antecesor, que le dejó con las arcas llenas de telas de araña, o puede que sea por eso mismo, porque no tiene un euro para alegría alguna. Pero el feo que le hizo el jueves al presidente de la UD, Manuel García Navarro, no venía a cuento. Le dijo al empresario que sabía de su interés por verse con ella, que había recibido varias llamadas al respecto del gerente del club, pero añadió a continuación que se ahorraran el esfuerzo porque no pensaba dar un duro al equipo amarillo. Lo dijo, claro, inaugurando una cancha deportiva, que permitirá a muchos jóvenes hacer deporte, pero con serios límites para la ilusión de jugar en un club de primera. Al menos por el camino que vamos.

Nada que hacer. Ya lo advirtió José Manuel Soria cuando sentaba sus reales, a ras del populacho, en la Alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria: ni un duro para la UD Las Palmas. Y lo repite con su estilo característico la actual alcaldesa, Josefa Luzardo, que además no se corta un pelo. Posiblemente sea que aprendió los gestos de su antecesor, que le dejó con las arcas llenas de telas de araña, o puede que sea por eso mismo, porque no tiene un euro para alegría alguna. Pero el feo que le hizo el jueves al presidente de la UD, Manuel García Navarro, no venía a cuento. Le dijo al empresario que sabía de su interés por verse con ella, que había recibido varias llamadas al respecto del gerente del club, pero añadió a continuación que se ahorraran el esfuerzo porque no pensaba dar un duro al equipo amarillo. Lo dijo, claro, inaugurando una cancha deportiva, que permitirá a muchos jóvenes hacer deporte, pero con serios límites para la ilusión de jugar en un club de primera. Al menos por el camino que vamos.