Beatificación de Arnáiz

Nunca es tarde cuando la dicha llega, dice el famosísimo refrán. Y la dicha llegará este viernes a la Autoridad Portuaria de Las Palmas, y más concretamente a sus nuevos mandamases, que verán normalizada su situación “por imperativo legal”. Una expresión esta última, que debería constar en las tarjetas de visita del presidente del organismo, José Manuel Arnáiz, al que se comerá con papas el consejo de administración que este viernes se constituye, como se lo comió con patatas (desde Madrid) el ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos. Por si alguien albergaba alguna duda acerca de las prisas de Arnáiz por cumplir sus compromisos, sepan que el orden del día contiene el nombramiento de director y el correspondiente análisis -con nuevo enfoque- del proyecto de ampliación del dique Reina Sofía. Dada la pertinaz falta de memoria del respetable, les recordamos que el ingeniero Arnáiz y el ingeniero Hernández, candidato de siempre a director del ente, asesoraron a una de las empresas perdedoras en el dique, Lopesan, a la que pronto se compensará debidamente.

Nunca es tarde cuando la dicha llega, dice el famosísimo refrán. Y la dicha llegará este viernes a la Autoridad Portuaria de Las Palmas, y más concretamente a sus nuevos mandamases, que verán normalizada su situación “por imperativo legal”. Una expresión esta última, que debería constar en las tarjetas de visita del presidente del organismo, José Manuel Arnáiz, al que se comerá con papas el consejo de administración que este viernes se constituye, como se lo comió con patatas (desde Madrid) el ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos. Por si alguien albergaba alguna duda acerca de las prisas de Arnáiz por cumplir sus compromisos, sepan que el orden del día contiene el nombramiento de director y el correspondiente análisis -con nuevo enfoque- del proyecto de ampliación del dique Reina Sofía. Dada la pertinaz falta de memoria del respetable, les recordamos que el ingeniero Arnáiz y el ingeniero Hernández, candidato de siempre a director del ente, asesoraron a una de las empresas perdedoras en el dique, Lopesan, a la que pronto se compensará debidamente.