El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Consecuencia de una herencia
La más que previsible desaparición de la casa-museo es consecuencia de un cúmulo de malas coincidencias. La iniciativa se debe al matrimonio formado por Jesús Gómez Doreste y Dolores Mejías, que recorrieron Canarias buscando mobiliario, enseres y arte canario. Pero a la muerte de Jesús Gómez, el proyecto empezó a hacer aguas. Fue entonces cuando entró a explotar el negocio la familia Cabrera y cuando se tuvo que vender para repartir la herencia entre los herederos de los dos matrimonios del fundador. El resto fue una sucesión de mala gestión e impagados que ha acabado con el embargo del que hemos dado cuenta aquí. Y, para remate, la desidia de las administraciones públicas, incapaces de alcanzar un acuerdo con los propietarios, van a propiciar este cierre.
La más que previsible desaparición de la casa-museo es consecuencia de un cúmulo de malas coincidencias. La iniciativa se debe al matrimonio formado por Jesús Gómez Doreste y Dolores Mejías, que recorrieron Canarias buscando mobiliario, enseres y arte canario. Pero a la muerte de Jesús Gómez, el proyecto empezó a hacer aguas. Fue entonces cuando entró a explotar el negocio la familia Cabrera y cuando se tuvo que vender para repartir la herencia entre los herederos de los dos matrimonios del fundador. El resto fue una sucesión de mala gestión e impagados que ha acabado con el embargo del que hemos dado cuenta aquí. Y, para remate, la desidia de las administraciones públicas, incapaces de alcanzar un acuerdo con los propietarios, van a propiciar este cierre.