El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Creyó que iba a una boda
No le gustó a Mercedes Roldós que hubiera reporteros gráficos esperando su llegada a las puertas de los juzgados de Granadera Canaria. Tanto que hasta llegó a afirmar que ella iba allí por un asunto personal. Vamos como si la audiencia no fuera pública, no se tratara de un hecho denunciado ante instancias públicas y no tuviera interés alguno saber cómo se conduce en los negocios privados alguien a quien todos pagamos. Más aún con la alergia que ella tienen a la corrupción. Y si a todo lo anterior sumamos que su empresa -suya, de su marido y de otros socios-, también dejó a deber a la Seguridad Social más de 25.500 euros, la cuestión se pone más interesante si cabe. Por cierto, que esa deuda con lo público se considera “crédito incobrable”, vaya tela.
No le gustó a Mercedes Roldós que hubiera reporteros gráficos esperando su llegada a las puertas de los juzgados de Granadera Canaria. Tanto que hasta llegó a afirmar que ella iba allí por un asunto personal. Vamos como si la audiencia no fuera pública, no se tratara de un hecho denunciado ante instancias públicas y no tuviera interés alguno saber cómo se conduce en los negocios privados alguien a quien todos pagamos. Más aún con la alergia que ella tienen a la corrupción. Y si a todo lo anterior sumamos que su empresa -suya, de su marido y de otros socios-, también dejó a deber a la Seguridad Social más de 25.500 euros, la cuestión se pone más interesante si cabe. Por cierto, que esa deuda con lo público se considera “crédito incobrable”, vaya tela.