El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Uno que da marcha atrás
Sabemos a ciencia cierta que no cundirá el ejemplo, porque cuando un político se pone majadero no lo hace cambiar de idea más que un revolcón en las urnas. Lo que está haciendo Soria con la UD Las Palmas lo hemos comparado en más de una ocasión con lo que hizo el alcalde de Oviedo, también del PP y de nombre Gabino de Lorenzo, con el club representativo de su ciudad. Lo dejó morir y le dio algún que otro puntillazo administrativo para que acabara en tercera. A cambio, se volcó en todos los órdenes con un equipo alternativo, el Astur, al que inmediatamente dio la espalda toda la sociedad ovetense en masa, incluidos los votantes del PP. Pues bien, desde agosto de 2003, cuando el descenso, a septiembre de 2004 ha pasado sólo un año y el alcalde pepero ya ha dado marcha atrás: pleno apoyo del Ayuntamiento al Real Oviedo, compra de entradas por 60.000 euros, mantenimiento del estadio con fondos municipales... Y, para terminar de darse un baño de oviedismo, hasta se ha hecho socio del club. Insistimos, Canarias es diferente, pero que alguno de los inteligentes asesores que pululan por determinados despachos tome nota, que se les puede venir encima.
Sabemos a ciencia cierta que no cundirá el ejemplo, porque cuando un político se pone majadero no lo hace cambiar de idea más que un revolcón en las urnas. Lo que está haciendo Soria con la UD Las Palmas lo hemos comparado en más de una ocasión con lo que hizo el alcalde de Oviedo, también del PP y de nombre Gabino de Lorenzo, con el club representativo de su ciudad. Lo dejó morir y le dio algún que otro puntillazo administrativo para que acabara en tercera. A cambio, se volcó en todos los órdenes con un equipo alternativo, el Astur, al que inmediatamente dio la espalda toda la sociedad ovetense en masa, incluidos los votantes del PP. Pues bien, desde agosto de 2003, cuando el descenso, a septiembre de 2004 ha pasado sólo un año y el alcalde pepero ya ha dado marcha atrás: pleno apoyo del Ayuntamiento al Real Oviedo, compra de entradas por 60.000 euros, mantenimiento del estadio con fondos municipales... Y, para terminar de darse un baño de oviedismo, hasta se ha hecho socio del club. Insistimos, Canarias es diferente, pero que alguno de los inteligentes asesores que pululan por determinados despachos tome nota, que se les puede venir encima.