El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
¿Qué me dices, Matilde?
Matilde Asián tiene un problema por la cara y por la cruz de cualquier moneda que quiera lanzar al aire para zafarse. Si sale cara y resulta que es mentira lo que dijo, que no fue el Gobierno, y más concretamente, el ministro de Justicia, quien ordenó a la Fiscalía que a su vez pidiera al juez Ruz el encarcelamiento de Luis Bárcenas, ha cometido un error político de tamaño sideral. Quiso con esa mentira ?de ser cierta esta parte de la versión- convencer a su electorado y a los ciudadanos en general de que es el PP el que realmente quiere aclarar todo lo que ha sucedido en torno a su financiación (la regular y la irregular) y dilucidar si esa financiación está o no directamente relacionada con la trama corrupta de Güttel. Con esa mentira, Matilde Asián, mano derecha de Soria y viceportavoz en el Congreso de los Diputados, sólo pretendía pintar ante los mosqueados ciudadanos un panorama que no es real, una trampa para incautos. Debe dimitir por ello. La otra versión, la que de inmediato ofreció el PP y el Fiscal General del Estado, deja a Matilde Asián en pelota picada, la convierte en ignorante supina o, en el mejor de los casos, en una irresponsable de la política que no sabe cuál es exactamente el estatus jurisdiccional que desempeña el Ministerio Fiscal y las garantías jurídicas que constitucionalmente está llamado a salvaguardar. Debe dimitir. Su intervención no dejó a nadie tranquilo, empezando por su propio partido. Porque si la viceportavoz y mano derecha de Soria es capaz de sostener que la Fiscalía General del Estado actúa de modo directo a las órdenes del ministro de Justicia, incluso en casos de corrupción protagonizados por su propio partido, será seguramente porque lo ha mamado dentro de la organización de la que forma parte. Lo sabe a ciencia cierta. Ha visto a Soria actuar, traspasar la línea de las garantías democráticas, ordenar purgas en la Policía, pedir servicios inconfesables al Ministerio Fiscal? Por eso se despachó la señora Asian con tanta naturalidad: “Debemos recordar que el Ministerio Fiscal está sometido a la jerarquía y, por tanto, es el ministro de Justicia y el Gobierno de España el que ha solicitado la prisión incondicional” de Luis Bárcenas. Debe irse para su casa. No puede alegar ignorancia, como terminó alegando en su rectificación, y si la alega, a su casa por ignorante.
Matilde Asián tiene un problema por la cara y por la cruz de cualquier moneda que quiera lanzar al aire para zafarse. Si sale cara y resulta que es mentira lo que dijo, que no fue el Gobierno, y más concretamente, el ministro de Justicia, quien ordenó a la Fiscalía que a su vez pidiera al juez Ruz el encarcelamiento de Luis Bárcenas, ha cometido un error político de tamaño sideral. Quiso con esa mentira ?de ser cierta esta parte de la versión- convencer a su electorado y a los ciudadanos en general de que es el PP el que realmente quiere aclarar todo lo que ha sucedido en torno a su financiación (la regular y la irregular) y dilucidar si esa financiación está o no directamente relacionada con la trama corrupta de Güttel. Con esa mentira, Matilde Asián, mano derecha de Soria y viceportavoz en el Congreso de los Diputados, sólo pretendía pintar ante los mosqueados ciudadanos un panorama que no es real, una trampa para incautos. Debe dimitir por ello. La otra versión, la que de inmediato ofreció el PP y el Fiscal General del Estado, deja a Matilde Asián en pelota picada, la convierte en ignorante supina o, en el mejor de los casos, en una irresponsable de la política que no sabe cuál es exactamente el estatus jurisdiccional que desempeña el Ministerio Fiscal y las garantías jurídicas que constitucionalmente está llamado a salvaguardar. Debe dimitir. Su intervención no dejó a nadie tranquilo, empezando por su propio partido. Porque si la viceportavoz y mano derecha de Soria es capaz de sostener que la Fiscalía General del Estado actúa de modo directo a las órdenes del ministro de Justicia, incluso en casos de corrupción protagonizados por su propio partido, será seguramente porque lo ha mamado dentro de la organización de la que forma parte. Lo sabe a ciencia cierta. Ha visto a Soria actuar, traspasar la línea de las garantías democráticas, ordenar purgas en la Policía, pedir servicios inconfesables al Ministerio Fiscal? Por eso se despachó la señora Asian con tanta naturalidad: “Debemos recordar que el Ministerio Fiscal está sometido a la jerarquía y, por tanto, es el ministro de Justicia y el Gobierno de España el que ha solicitado la prisión incondicional” de Luis Bárcenas. Debe irse para su casa. No puede alegar ignorancia, como terminó alegando en su rectificación, y si la alega, a su casa por ignorante.