Héroe de campaña: un concejal del PP en Cáceres

Un concejal del PP en la ciudad de Cáceres se ha convertido por méritos propios, y seguramente sin pretenderlo, en el héroe de la actual campaña electoral. Se llama Joaquín Rumbo, y en el pleno de la Corporación del pasado viernes, 13 de mayo, dio un campanazo que nadie esperaba: “cansado” del perjuicio económico que supone para el Ayuntamiento de la ciudad tener bloqueada desde hace dos meses la adjudicación del servicio de aguas, votó con los concejales del PSOE a favor de anular un acuerdo anterior que declaraba nulo el concurso y sumó su voto a la propuesta de adjudicárselo a Acciona. Su partido e Izquierda Unida estaban actuando como pinza para impedir que la alcaldesa adjudicara el servicio de aguas a Acciona, adjudicación que cuenta con todas las bendiciones técnicas y jurídicas frente a la otra competidora, Canal de Isabel II, de mayores preferencias peperas. Pero como de lo que se trataba era de incordiar, la pinza de izquierda y derecha se opuso hasta que el concejal Rumbo se plantó. “Esta es una situación de bloqueo que es un despropósito del que todos somos culpables”, dijo el concejal, quien añadió que ésa era su última oportunidad para “hacer algo en beneficio de la ciudad”. Efectivamete, Joaquín Rumbo no va en las listas del PP y ya ha sido declarado tránsfuga por su partido.

Un concejal del PP en la ciudad de Cáceres se ha convertido por méritos propios, y seguramente sin pretenderlo, en el héroe de la actual campaña electoral. Se llama Joaquín Rumbo, y en el pleno de la Corporación del pasado viernes, 13 de mayo, dio un campanazo que nadie esperaba: “cansado” del perjuicio económico que supone para el Ayuntamiento de la ciudad tener bloqueada desde hace dos meses la adjudicación del servicio de aguas, votó con los concejales del PSOE a favor de anular un acuerdo anterior que declaraba nulo el concurso y sumó su voto a la propuesta de adjudicárselo a Acciona. Su partido e Izquierda Unida estaban actuando como pinza para impedir que la alcaldesa adjudicara el servicio de aguas a Acciona, adjudicación que cuenta con todas las bendiciones técnicas y jurídicas frente a la otra competidora, Canal de Isabel II, de mayores preferencias peperas. Pero como de lo que se trataba era de incordiar, la pinza de izquierda y derecha se opuso hasta que el concejal Rumbo se plantó. “Esta es una situación de bloqueo que es un despropósito del que todos somos culpables”, dijo el concejal, quien añadió que ésa era su última oportunidad para “hacer algo en beneficio de la ciudad”. Efectivamete, Joaquín Rumbo no va en las listas del PP y ya ha sido declarado tránsfuga por su partido.