El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Losantos renueva por la Cope
No cabía esperar otra cosa de la Conferencia Episcopal Española, garante de las esencias de la doctrina que emana de la Santa Madre Iglesia y de los designios divinos que defiende en España, junto a ella, el Partido Popular. Resígnense progres y ácratas; prepárense para lo que les espera gays, lesbianas y transexuales; agárrense los machos todos los ministros, directores generales y subsecretarios socialistas; tiemble el rojerío y el votante del PSOE, que la Iglesia ha renovado por dos años a Jiménez Losantos en la Cope, su emisora. Era de esperar, por otro lado, que la jerarquía eclesiástica se agarrara al único mesías que le queda en las ondas, una vez los voceros ex gubernamentales de la Obra han perdido la credibilidad necesaria para transmitir la doctrina del Santo Oficio. Losantos tenía una suculenta oferta de un grupo de empresarios vinculados al PP (¡no me diga!) que estaban dispuestos a ponerle piso y emisora (el 50% para él, más seis millones de euros) a cambio de mantener enhiestas las esencias de la reserva espiritual de Occidente. La Iglesia, una vez más, siempre tan piadosa y defensora de la verdad y la concordia, ha preferido cargar ella con la cruz.
No cabía esperar otra cosa de la Conferencia Episcopal Española, garante de las esencias de la doctrina que emana de la Santa Madre Iglesia y de los designios divinos que defiende en España, junto a ella, el Partido Popular. Resígnense progres y ácratas; prepárense para lo que les espera gays, lesbianas y transexuales; agárrense los machos todos los ministros, directores generales y subsecretarios socialistas; tiemble el rojerío y el votante del PSOE, que la Iglesia ha renovado por dos años a Jiménez Losantos en la Cope, su emisora. Era de esperar, por otro lado, que la jerarquía eclesiástica se agarrara al único mesías que le queda en las ondas, una vez los voceros ex gubernamentales de la Obra han perdido la credibilidad necesaria para transmitir la doctrina del Santo Oficio. Losantos tenía una suculenta oferta de un grupo de empresarios vinculados al PP (¡no me diga!) que estaban dispuestos a ponerle piso y emisora (el 50% para él, más seis millones de euros) a cambio de mantener enhiestas las esencias de la reserva espiritual de Occidente. La Iglesia, una vez más, siempre tan piadosa y defensora de la verdad y la concordia, ha preferido cargar ella con la cruz.