25 millones en alquileres

La previsión de inauguración del nuevo Palacio de Justicia en 2012 es un arcano que mantiene Ruano bajo siete llaves para que no se les rebele aún más el sector en Canarias, muy cabreado con este Gobierno ante el disparate de organización y desplifarro que preside sus actos en esta materia. El nuevo retraso va a suponer sumar cinco años a las frívolas previsiones de doña Australia, lo que a razón de cinco millones de euros anuales en alquileres de locales, arroja la cantidad de 25 millones de euros. Eso y la incómoda y desquiciante dispersión de sedes judiciales que han sido convenientemente reformadas y alicatadas hasta el techo con dinerito público, a mayor gloria de los caseros, que se frotan las manos ante la ineficacia y la ligereza de la Administración autonómica. Nadie sabe a día de hoy si, inaugurado el nuevo Palacio de Justicia en 2012 y desalojado el recién remodelado edificio de Granadera Canaria, la Dirección General de Justicia se trasladará hasta allí o se quedará ocupando su lujosa y onerosa planta del edificio Dunas Triana.

La previsión de inauguración del nuevo Palacio de Justicia en 2012 es un arcano que mantiene Ruano bajo siete llaves para que no se les rebele aún más el sector en Canarias, muy cabreado con este Gobierno ante el disparate de organización y desplifarro que preside sus actos en esta materia. El nuevo retraso va a suponer sumar cinco años a las frívolas previsiones de doña Australia, lo que a razón de cinco millones de euros anuales en alquileres de locales, arroja la cantidad de 25 millones de euros. Eso y la incómoda y desquiciante dispersión de sedes judiciales que han sido convenientemente reformadas y alicatadas hasta el techo con dinerito público, a mayor gloria de los caseros, que se frotan las manos ante la ineficacia y la ligereza de la Administración autonómica. Nadie sabe a día de hoy si, inaugurado el nuevo Palacio de Justicia en 2012 y desalojado el recién remodelado edificio de Granadera Canaria, la Dirección General de Justicia se trasladará hasta allí o se quedará ocupando su lujosa y onerosa planta del edificio Dunas Triana.