El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
El Niño Lucas se defiende con dinero público
Ya anda caminando en el Juzgado Contencioso-Administrativo número 1 de Las Palmas de Gran Canaria el recurso interpuesto por la concejal de CC en Santa Brígida, Victoria Casas, contra una resolución del alcalde de la villa, Lucas Bravo de Laguna, por la que el buen señor designaba abogada y procurador para plantear a Casas una demanda civil de protección al honor. La acción del Niño Bravo tenía su origen en los comentarios que sobre su persona y sobre las de Amalia Bosch y Emilio Ventura (del sector ecopijo) vertieron algunos ciudadanos en el blog de la concejal nacionalista. Ésta se queja, naturalmente, de que el alcalde pague con dinero público los más 3.000 euros de provisión de fondos que le ha pedido la letrada María Rosa Díaz Bertrana, y más en los tiempos de austeridad que corren. La vista sobre este recurso se celebrará en diciembre y, de anularse el decreto del alcalde, será éste y sus concejales los que se rasquen el bolsillo si quieren pleitear como cualquier hijo de vecino.
Ya anda caminando en el Juzgado Contencioso-Administrativo número 1 de Las Palmas de Gran Canaria el recurso interpuesto por la concejal de CC en Santa Brígida, Victoria Casas, contra una resolución del alcalde de la villa, Lucas Bravo de Laguna, por la que el buen señor designaba abogada y procurador para plantear a Casas una demanda civil de protección al honor. La acción del Niño Bravo tenía su origen en los comentarios que sobre su persona y sobre las de Amalia Bosch y Emilio Ventura (del sector ecopijo) vertieron algunos ciudadanos en el blog de la concejal nacionalista. Ésta se queja, naturalmente, de que el alcalde pague con dinero público los más 3.000 euros de provisión de fondos que le ha pedido la letrada María Rosa Díaz Bertrana, y más en los tiempos de austeridad que corren. La vista sobre este recurso se celebrará en diciembre y, de anularse el decreto del alcalde, será éste y sus concejales los que se rasquen el bolsillo si quieren pleitear como cualquier hijo de vecino.