Olarte y el parking de Elder

La recogida de velas de José Manuel Soria 24 horas antes de que el consejero de Turismo, José Juan Herrera Velázquez, le dijera que nones al cierre del Museo de la Ciencia, no parece que vaya a ser el penúltimo capítulo de la saga de esta perreta a modo de sainete. El viernes, sin ir más lejos, hubo debate ciudadano en el hotel Reina Isabel promovido por el equipo de Nardy Barrios. Además de poner a Soria a caer de un burro, los participantes pudieron escuchar de boca de Lorenzo Olarte, quien puso en marcha el museo en su etapa de vicepresidente del Gobierno y consejero de Turismo, una tesis todavía desconocida por el común de los mortales: que en el convenio firmado en su día entre administraciones estatal y autonómica (él mismo) para el desarrollo del Elder, Madrid cedió la gestión del edificio y del subsuelo, siempre que los beneficios logrados mediante el aparcamiento se destinaran al museo. Hemos vuelto a revisar los presupuestos de ese centro y no encontramos nada que haga referencia a ese ingreso. Preguntaremos en Sagulpa, que lo mismo tienen guardadas las perras en un saco a la espera de que alguien las reclame.

La recogida de velas de José Manuel Soria 24 horas antes de que el consejero de Turismo, José Juan Herrera Velázquez, le dijera que nones al cierre del Museo de la Ciencia, no parece que vaya a ser el penúltimo capítulo de la saga de esta perreta a modo de sainete. El viernes, sin ir más lejos, hubo debate ciudadano en el hotel Reina Isabel promovido por el equipo de Nardy Barrios. Además de poner a Soria a caer de un burro, los participantes pudieron escuchar de boca de Lorenzo Olarte, quien puso en marcha el museo en su etapa de vicepresidente del Gobierno y consejero de Turismo, una tesis todavía desconocida por el común de los mortales: que en el convenio firmado en su día entre administraciones estatal y autonómica (él mismo) para el desarrollo del Elder, Madrid cedió la gestión del edificio y del subsuelo, siempre que los beneficios logrados mediante el aparcamiento se destinaran al museo. Hemos vuelto a revisar los presupuestos de ese centro y no encontramos nada que haga referencia a ese ingreso. Preguntaremos en Sagulpa, que lo mismo tienen guardadas las perras en un saco a la espera de que alguien las reclame.