El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Pagaba, pero las recogía él
Continuamos con la carta de Ángel Cervantes, que no nos cabía toda más arriba: “Hasta el mes de junio de 2004 me ocupaba yo personalmente, con mi propio automóvil, de llevar y recoger a mis hijas del colegio, y lo hacía sin menoscabo del cumplimiento de mis obligaciones laborales”. Hasta aquí la versión que nos ofrece el señor Cervantes, que incluimos de modo íntegro y que respetamos porque tiene su derecho a decir lo que le plazca. Pero nosotros debemos insistir en lo que sabemos, y en lo que publicamos: en más de una ocasión y de dos, a las hijas del letrado del Puerto (qué más da el sexo de sus hijos) eran recogidas en la plaza de La Victoria o de España por una furgoneta Renault Kangoo (muy apropiado el nombre del modelo) propiedad de la Autoridad Portuaria de Las Palmas. Y el señor Cervantes se podrá poner como quiera, incluso haciendo el pino-puente, pero las cosas son como son y así se las hemos contado. Pero tenemos más.
Continuamos con la carta de Ángel Cervantes, que no nos cabía toda más arriba: “Hasta el mes de junio de 2004 me ocupaba yo personalmente, con mi propio automóvil, de llevar y recoger a mis hijas del colegio, y lo hacía sin menoscabo del cumplimiento de mis obligaciones laborales”. Hasta aquí la versión que nos ofrece el señor Cervantes, que incluimos de modo íntegro y que respetamos porque tiene su derecho a decir lo que le plazca. Pero nosotros debemos insistir en lo que sabemos, y en lo que publicamos: en más de una ocasión y de dos, a las hijas del letrado del Puerto (qué más da el sexo de sus hijos) eran recogidas en la plaza de La Victoria o de España por una furgoneta Renault Kangoo (muy apropiado el nombre del modelo) propiedad de la Autoridad Portuaria de Las Palmas. Y el señor Cervantes se podrá poner como quiera, incluso haciendo el pino-puente, pero las cosas son como son y así se las hemos contado. Pero tenemos más.