Otro del PP que quieren que le cojan los humildes

Según una carta denuncia remitida a la presidenta del PP de Gran Canaria, María Australia Navarro, un vecino de Moya se queja de que un concejal de esa formación, de nombre Juan José Roque Cerpa, le ha enviado desde su teléfono móvil una serie de mensajes bastante insultantes a la par que despectivos. Entre otras lindezas, el denunciante, Fernando Martín González, asegura que el concejal le ha dicho “que se meta la lengua por el culo” y que “le coja los huevos”, lo que unido a lo que ha denunciado públicamente la concejal de Santa Brígida Guadalupe del Río sobre el alcalde del PP, Lucas Bravo de Laguna, nos conduce a temer que en ese partido hay un problema muy extendido de falta de cariño en los genitales del personal masculino. El denunciante también asegura que el concejal Roque Cerpa también se ha metido con su discapacidad, una lesión medular que le impide caminar, cosa que no se cree el autor de tan edificantes mensajes. A ver si no va a terminar aquí el uso escatológico y cochino de los móviles del PP.

Según una carta denuncia remitida a la presidenta del PP de Gran Canaria, María Australia Navarro, un vecino de Moya se queja de que un concejal de esa formación, de nombre Juan José Roque Cerpa, le ha enviado desde su teléfono móvil una serie de mensajes bastante insultantes a la par que despectivos. Entre otras lindezas, el denunciante, Fernando Martín González, asegura que el concejal le ha dicho “que se meta la lengua por el culo” y que “le coja los huevos”, lo que unido a lo que ha denunciado públicamente la concejal de Santa Brígida Guadalupe del Río sobre el alcalde del PP, Lucas Bravo de Laguna, nos conduce a temer que en ese partido hay un problema muy extendido de falta de cariño en los genitales del personal masculino. El denunciante también asegura que el concejal Roque Cerpa también se ha metido con su discapacidad, una lesión medular que le impide caminar, cosa que no se cree el autor de tan edificantes mensajes. A ver si no va a terminar aquí el uso escatológico y cochino de los móviles del PP.