Canarias Ahora Opinión y blogs

Sobre este blog

La portada de mañana
Acceder
Puigdemont estira la cuerda pero no rompe con Sánchez
El impacto del cambio de régimen en Siria respaldado por EEUU, Israel y Turquía
OPINIÓN | 'Pesimismo y capitalismo', por Enric González

El surrealismo, según el delegado del Gobierno

Muchas cosas han cambiado en la Delegación del Gobierno en Canarias tras la llegada de Salvador García Llanos, entre otras, la duración de las ruedas de prensa. Luego está la pluma que tiene el nuevo inquilino de la Plaza de la Feria, que es capaz incluso de llamar la atención, con casi dos meses de antelación, sobre lo que finalmente acabó ocurriendo en las elecciones al Senado por su isla, Tenerife. En un artículo publicado aquí bajo el título de Surrealismo, Llanos escribió que “presidente y vicepresidente, socios y todo lo que ustedes quieran en el Cabildo, son rivales en las elecciones (...). No digan que Buñuel no lo hubiera imaginado mejor. Pregunten lo que quieran, hasta en plan sarcástico se pudiera: ¿cómo se lo montarán Melchior y Alarcó? ¿Pactarán los ataques? ¿Concurrirán en un mismo debate? ¿Dejarán al Cabildo de sus amores al margen? ¿Lograrán impedir uno y otro la impresión generalizada de que PP y CC la misma cosa es?” Surrealismo puro: el vice le ganó al presi.

Muchas cosas han cambiado en la Delegación del Gobierno en Canarias tras la llegada de Salvador García Llanos, entre otras, la duración de las ruedas de prensa. Luego está la pluma que tiene el nuevo inquilino de la Plaza de la Feria, que es capaz incluso de llamar la atención, con casi dos meses de antelación, sobre lo que finalmente acabó ocurriendo en las elecciones al Senado por su isla, Tenerife. En un artículo publicado aquí bajo el título de Surrealismo, Llanos escribió que “presidente y vicepresidente, socios y todo lo que ustedes quieran en el Cabildo, son rivales en las elecciones (...). No digan que Buñuel no lo hubiera imaginado mejor. Pregunten lo que quieran, hasta en plan sarcástico se pudiera: ¿cómo se lo montarán Melchior y Alarcó? ¿Pactarán los ataques? ¿Concurrirán en un mismo debate? ¿Dejarán al Cabildo de sus amores al margen? ¿Lograrán impedir uno y otro la impresión generalizada de que PP y CC la misma cosa es?” Surrealismo puro: el vice le ganó al presi.