El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Un ''tribunal de honor''
Fue el mismo Felipe Afonso El Jaber el que se ocupó de contestar negativamente al PSOE sus reiteradas invitaciones a formar parte de la comisión de investigación del pelotazo del canódromo. Como saben, el PP rechazó una tras otras esas invitaciones, quizás temeroso de tener que sonrojarse a cada paso que la tal comisión diera, o peor aún, atenazados por el miedo que les iba a recorrer la espina dorsal al constatar oficialmente lo que siempre han sabido: que el berenjenal en el que se ha metido el PP municipal, la institución y la ciudad en su conjunto, tiene un responsable principal: José Manuel Soria López. Pero tras haber conocido lo que dijo este viernes en el pleno municipal que aprobó las conclusiones de esa investigación, nos ha venido a la cabeza la excusa que siempre dio a los socialistas El Jaber para rechazar las invitaciones: “No queremos participar de un tribunal de honor”. ¿Qué honor ni qué ocho cuartos, don Felipe? Lo que se dilucidaba era quién o quiénes eran los responsables de ese saqueo continuado a las arcas públicas. Que el honor es otra cosa, aunque estos siempre lo terminan mezclando con el dinero.
Fue el mismo Felipe Afonso El Jaber el que se ocupó de contestar negativamente al PSOE sus reiteradas invitaciones a formar parte de la comisión de investigación del pelotazo del canódromo. Como saben, el PP rechazó una tras otras esas invitaciones, quizás temeroso de tener que sonrojarse a cada paso que la tal comisión diera, o peor aún, atenazados por el miedo que les iba a recorrer la espina dorsal al constatar oficialmente lo que siempre han sabido: que el berenjenal en el que se ha metido el PP municipal, la institución y la ciudad en su conjunto, tiene un responsable principal: José Manuel Soria López. Pero tras haber conocido lo que dijo este viernes en el pleno municipal que aprobó las conclusiones de esa investigación, nos ha venido a la cabeza la excusa que siempre dio a los socialistas El Jaber para rechazar las invitaciones: “No queremos participar de un tribunal de honor”. ¿Qué honor ni qué ocho cuartos, don Felipe? Lo que se dilucidaba era quién o quiénes eran los responsables de ese saqueo continuado a las arcas públicas. Que el honor es otra cosa, aunque estos siempre lo terminan mezclando con el dinero.