Canarias ha registrado en lo que va de año un total de 57 conatos de incendio forestal en las islas de Tenerife, Gran Canaria, La Gomera, El Hierro y La Palma.
A estos se suma el único incendio forestal hasta el momento que tuvo lugar el pasado 17 de agosto en el barranco de Fataga, en el municipio grancanario de San Bartolomé de Tirajana, y que se logró controlar en un día, informa la Consejería de Emergencias del Gobierno de Canarias en una nota.
La dirección de extinción de este incendio correspondió al Cabildo de Gran Canaria, con el apoyo del Gobierno de Canarias, al decretarse el Nivel 1 del Plan Específico de Protección Civil y Atención de Emergencias por Incendios Forestales de la Comunidad Autónoma de Canarias (INFOCA).
El fuego se dio por estabilizado horas después de su inicio, tras afectar a una superficie de diez hectáreas dentro de un perímetro de 2,35 kilómetros, y por controlado 24 horas después de su comienzo.
El consejero de Política Territorial, Cohesión Territorial y Aguas del Gobierno de Canarias, Manuel Miranda, aseguró que “agosto ha sido un mes relativamente tranquilo con solo doce incidentes, tres menos que en julio, y las cosas han ido mucho mejor de lo esperado, la meteorología ha ayudado bastante y además ha sido fundamental la colaboración ciudadana y la rápida respuesta de los operativos de extinción de los cabildos y ayuntamientos”.
El consejero y máximo responsable de emergencias en Canarias se mostró satisfecho por los resultados provisionales de la campaña hasta el momento, pero recordó que el verano no ha finalizado y realizó un llamamiento a seguir extremando la prudencia y la vigilancia en los montes.
Todos los meses de este año han contabilizado al menos dos conatos de incendio, siendo julio el de mayor número de incidentes con 15, siete en Tenerife, siete en Gran Canaria, en el que se incluye el incendio de Fataga, y uno en La Gomera.
Agosto ha sido el segundo por número con trece, seguido de los inusuales meses de febrero y enero con ocho y siete respectivamente, junio con siete, abril con cuatro y mayo y marzo con dos cada uno.
Por islas, Tenerife acumula el mayor número de intervenciones, con 25, la mayoría de ellas localizadas en los municipios de la zona norte, como El Rosario, Tacoronte, Icod de Los Vinos o Los Realejos y también en Guía de Isora y Fasnia. Gran Canaria ha anotado 17 conatos, además del incendio forestal mencionado, repartidos por diversos municipios de la isla.
En La Gomera los servicios de extinción han actuado en ocho ocasiones, en Vallehermoso, Valle Gran Rey, Hermigua, Agulo y San Sebastián de La Gomera; en La Palma en cuatro incidentes en Garafía, Tijarafe, Los Llanos de Aridane y El Paso y, por último, en El Hierro en tres incendios registrados en Valverde y El Pinar.
La rapidez en la actuación y la eficacia de los trabajos realizados por los equipos de extinción insulares y autonómicos han evitado su propagación y, por lo tanto, un gran incendio forestal, resaltan desde el Ejecutivo.
Aire seco y sequía
El aumento de las temperaturas, el aire seco y la sequía galopante, la más larga de la que se tienen registros desde 1961, han contribuido al aumento del número de estos casos y pequeños incendios en zonas urbanas, de medianías e interfaz en estas islas.
Ante esta situación inusual, la Dirección General de Emergencias del Gobierno de Canarias, declaraba el pasado 18 de marzo la prealerta por riesgo de incendio forestal en La Palma, El Hierro, La Gomera, Tenerife y Gran Canaria, situación que se mantiene a día de hoy.
El Gobierno de Canarias recuerda que, en el caso de ver humo en zona de monte, es necesario llamar inmediatamente al 112 para alertar de lo que ocurre y dar una ubicación lo más exacta posible de dónde se ve.
Además, solicita a la población que extreme las precauciones en el monte para evitar incendios como, por ejemplo, no tirar colillas encendidas ni cerillas y evitar dejar desperdicios en zonas arboladas.
El Ejecutivo recuerda también que es importante no acampar fuera de las zonas habilitadas, especialmente en áreas apartadas de las vías de acceso, ya que en caso de incendio podría quedar rodeado por el fuego. Se debe evitar realizar senderismo y es importante no salir de los circuitos establecidos.
Con el objetivo de proteger las viviendas es importante mantener una franja limpia y libre de vegetación seca y residuos a su alrededor, así como en las parcelas que están sin edificar.
Además, el Gobierno resalta que es conveniente almacenar los combustibles en lugares ventilados y protegidos y evitar la acumulación de materiales secos en cobertizos, toldos o ventanas.