Dar visibilidad a las mujeres que trabajan en los ámbitos forestal y medioambiental. Ese es el objetivo de ‘La savia de las mujeres. Vidas que siembran isla’ un corto documental firmado por la productora Lagarta Comunicación que pone el énfasis en el papel de estas mujeres que trabajan en el ámbito rural grancanario. Esta iniciativa ha contado con el liderazgo de la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria, el apoyo de la Consejería de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria y la financiación del Gobierno autonómico. El corto, que está acompañado por una muestra fotográfica, se estrenará este viernes 17 de septiembre a las 20.30 horas en el Centro Cultual de Tejeda, pero también ya ha cerrado otros dos pases en Mogán (18 de septiembre a las 20.30 en la Plaza del Barranquillo de Andrés) y en Tasarte (24 de septiembre a las 20.30 horas en el Salón del Edificio de Usos Múltiples).
El trabajo recoge testimonios de mujeres de muy diversos ámbitos que han dedicado a sus vidas a la conservación, restauración y protección del medio ambiente de Gran Canaria. En total, se realizaron 21 entrevistas a mujeres procedentes de diferentes municipios entre los 24 y los 86 años de edad. Un abanico grande desde el punto de vista generacional que permite dar una visión amplia de la gestión del medio rural que va desde sus usos tradicionales a las últimas intervenciones destinadas a la reforestación y restauración de nuestros ecosistemas. Para ello se han recogido los testimonios de agentes de medio ambiente, peonas, bomberas, pilotas e ingenieras forestales, vigilantes de área recreativa, vecinas, hierberas, activistas e investigadoras científicas, entre otras. El punto fuerte de esta tarea de investigación es la realización de ese documental que se estrena en Tejeda, pero el trabajo también ha dado sus frutos en forma de exposición fotográfica y en la futura edición de un cuaderno. Esta iniciativa va más allá de ofrecer los testimonios de estas mujeres y sus vivencias en el ámbito medioambiental. Se plantea, también, como un punto de salida para incentivar la investigación social en estos ámbitos desde la perspectiva de género.
Según señala Pilar Pérez, directora de la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria, “la propuesta parte de la falta de visibilidad de las mujeres en la historia en general y, concretamente, en el mundo forestal y rural de Gran Canaria. En este caso decidimos dar voz y espacio a estas mujeres que, teniendo o no una profesión forestal o ambiental reconocida, han estado siempre relacionadas con estos sectores y no son nombradas, ni siquiera imaginadas en estos ámbitos”, comenta la técnico del Cabildo insular. Mujeres que han sufrido el olvido pese “haber existido, convivido, trabajado, observado, estudiado y sentido en los territorios que hoy conforman la Reserva de la Biosfera”. La idea, finaliza, es darles voz y reconocer su papel como referentes en el territorio a través de sus vivencias y experiencias.