Robbie Williams, incombustible, se entrega a Gran Canaria en su único concierto en España

Laura Bautista / Efe

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Uno de los artistas que más vende en el mundo y la oportunidad de verlo en su único concierto este año en España: La llegada de Robbie Williams al estadio de Gran Canaria fue más que esperada, aclamada, y es que el artista británico tenía la fórmula perfecta para abrir por todo lo alto las tres jornadas de música del tercer Granca Live Fest.

Arropado 17.000 espectadores, según la organización, en cuanto se encendieron las luces con XXV, nombre de su último álbum, el público se dispuso a seguir el viaje musical que había preparado Williams, una estrella que no dejó indiferente a nadie con una puesta en escena arrolladora.

Llegaron los gritos antes que él: “¿Están preparados?”, anunció el coro de fondo. “Soy Robbie Williams, este es mi culo y soy un fenómeno”, bromeó el británico. No hubo duda en que el público estaba de acuerdo, entregado ya con Let me entertain you.

Disfrutón, agradecido con el público y, entre broma y broma sobre su vida en los noventa, The full monty medley hizo su magia para mover las caderas a todo un estadio. El artista estrechó un diálogo con su gente, donde se confesó “vulnerable” con Strong, que sus seguidores cantaron junto a él.

Con una energía vibrante, llegó la noche en la que Gran Canaria ha sido escenario del regreso de Williams, un artista que solo ofrecerá dos conciertos este 2024. “Manos en el aire todo el mundo”, pidió el cantante, vestido de blanco y acompañado sobre el escenario por una veintena de personas, entre músicos y cuerpo de baile.

Ganador de 18 premios Brit, dos Grammy, tres Ivor Novello, cinco MTV Europe Music Awards y poseedor de tres récord Guinness, entre otros, uno de los artistas más grandes de los noventa ha vuelto a demostrar porqué cuenta con más de 60 millones de álbumes vendidos.

Se dejó abrazar y derrochó carisma, enamorando a un público entregado que no se resistió a cantar Come undone y recordando cómo “rompió todas las normas” para hundirse en las miles de voces cantando Millennium.

Rememoró los tiempos de Take That con su inmortal Back to good y creó recuerdos memorables en su público con Love my life grabando incluso videos personalizados durante el espectáculo, y regalando camisetas con su dulce Candy.

El estadio de Gran Canaria, que espera sellar este fin de semana un nuevo hito de afluencia en el festival, ha vivido un concierto de emoción con paso por los doce álbumes de estudio de Robbie Williams y por toda una vida dedicada a la música, donde no faltaron temas como Feel, homenajes a quienes ya no están en Advertising space, Kids, o los temas románticos She is the one o el eterno Rock DJ, con el que ha vuelto a “desnudarse” musicalmente.

Con cerca de 30 años sobre los escenarios, el cantante se ha mostrado en la mejor forma para emprender un viaje por su trayectoria musical, que es historia viva y banda sonora para varias generaciones.

'Angels' despidió el concierto, con Robbie Williams arrodillado, cantando a capela y emocionado por la acogida recibida en la isla.

Salpicando de temas icónicos dos horas de concierto, Gran Canaria ha vibrado con un artista completo e incombustible, capaz de tomar las riendas del pop, pero también hacer bailar a millones de personas a ritmo de rock, swing, dance o hip hop, y enamorar con baladas por las que no pasan los años.

El británico irrumpió en el estadio para cerrar el primero de los tres días de conciertos del Grancalive Fest.

Dos Pedros, Pastor y Capó

Pedro Pastor y Pedro Capó dieron antes el pistoletazo de salida a un festival que espera recibir a más de 80.000 personas hasta el sábado, con diferentes estilos, pero una misma energía compartida.

El madrileño Pedro Pastor ha dado un paseo por su nuevo álbum, Escorpiano, un éxito más en la trayectoria emergente del hijo del también cantautor Luis Pastor y Lourdes, hermana del cantante y compositor tinerfeño Pedro Guerra.

Con los aires latinos de un disco escrito en su viaje por Puerto Rico, Colombia, Ecuador, Chile, Argentina y Uruguay, Pastor conectó con el público y con el siguiente artista de la noche, Pedro Capó, un autor de buena vibra y mucha fiesta.

El cantante de Puerto Rico pasó de la Calma, como se denomina uno de sus temas más escuchados, a La fiesta, un tema que ha conquistado por su letra y ritmo a millones de amantes de la música en todo el planeta.

Capó, que creó una conexión instantánea con su público, mantuvo una conversación de ida y vuelta con las miles de almas que cantaron a todo pulmón cada una de sus canciones.

Encantado de estar de nuevo en Canarias, el artista de San Juan se dejó querer, y su amor fue correspondido por todo lo alto por los grancanarios, que bailaron y corearon letra a letra sus trabajos más veteranos y los nuevos, sumergiéndose de lleno en su álbum La neta, que ha regalado sencillos recientes, como Existo. un tema “con actitud” que canta junto a Carín León.

Mañana vuelve el GrancaLive Fest con un desfile de estrellas y el plato fuerte de Black Eyes Peas, que cerrarán el viernes ya de madrugada y después de una tarde de música con Flor SZ, Nia, Álvaro de Luna, Juanes, Melendi y Mora, además de varias sorpresas que se ha guardado la organización para un festival que quiere hacer historia.