La Caja Insular de Ahorros de Canarias alcanzó un volumen de negocio de 12.370 millones de euros a final de 2006, lo que supone un 23% más que el ejercicio anterior, informó este lunes el director general de la entidad financiera, Juan Manuel García Falcón.
Este crecimiento, según explicó, se debe a un aumento del negocio típico bancario, con un importante aumento de los depósitos y de la inversión crediticia.
De acuerdo a las cuentas anuales de 2006 aprobadas este lunes por la Asamblea General de La Caja de Canarias, la inversión crediticia aumentó en más de 1.250 millones de euros, lo que representa un crecimiento del 28% frente al año anterior.
Destaca especialmente el aumento experimentado en la financiación de empresas y particularmente, el segmento hipotecario de primera vivienda, indicó García Falcón en una rueda de prensa previa a la Asamblea General.
Los recursos ajenos experimentaron un crecimiento del 19%, como consecuencia del incremento de los depósitos de clientes y las emisiones de cédulas, bonos y obligaciones subordinadas.
La evolución positiva del volumen de negocio de la entidad y la contención de los costes de estructura permitió unos buenos resultados, en línea con la estrategia emprendida por La Caja, explicó su director general, quien destacó el saneamiento logrado, así como la elevada solvencia.
De acuerdo a las cuentas, el margen ordinario se elevó un 10%, hasta los 165,3 millones de euros; y el margen de explotación aumentó un 17%, hasta los 67,3 millones de euros, a pesar del aumento del 8,1% de los gastos de personal.
El beneficio antes de impuestos creció un 35%, respecto al ejercicio anterior, hasta alcanzar los 48 millones de euros.
Asimismo, el beneficio final ascendió un 40,2 millones de euros, es decir, más de 6 millones de euros respecto al año anterior, y por encima de lo previsto.
La entidad dedicó un 34% de ese resultado neto a Obra Social, con lo que se supera en más de diez puntos la media de beneficios que el sector de cajas destina para el presente año a Obra Social, establecido en un 23,5%.
La morosidad se redujo frente a años anteriores, hasta el 0,47% a final de 2006, lo que sitúa a La Caja de Canarias en mejor situación que la media del sector.
La entidad financiera continuó en 2006 con su política de dotaciones para posibles insolvencias, que han elevado la cobertura de activos dudosos hasta un 368%, lo que supone 42 puntos más respecto al cierre del año 2005.
Respecto a los servicios, se siguieron impulsando los canales alternativos: Banca Electrónica -Internet-, Banca Automatizada -Cajeros- y Banca Telefónica.
Estos canales alternativos permitieron 50 millones de transacciones durante el año 2006, lo que representa un 16% más de operaciones que el ejercicio anterior y permite que a través de estos canales se realicen casi el 50% del total de operaciones bancarias.
Las cuentas anuales del ejercicio 2006 aprobadas por la Asamblea General cuentan con informes totalmente favorables de La Comisión de Control y de la firma independiente de auditoría Ernst & Young, indicó el director general.
22 nuevas oficinas en 2007
A finales de 2006, La Caja de Canarias contaba con 1.126 empleados, el 90% de ellos fijos, y 170 oficinas, a las que se unirán otras 22 que se abrirán este año.
La Asamblea de La Caja aprobó este lunes también las líneas generales de actuación para el ejercicio 2007, en las que destacan el impulso del negocio tradicional con el reforzamiento comercial de los productos Nómina Canaria e Hipoteca Canaria, así como la potenciación comercial del negocio de pymes y comercios.
El director general informó también de que, en abril pasado, Moody's estableció las nuevas calificaciones crediticias otorgadas a entidades financieras de España.
Respecto a Caja Insular de Ahorros de Canarias, la agencia internacional confirmó su rating de máxima solvencia a corto plazo (P1) y mejora su rating a largo plazo desde A3 a A2.
En su revisión Moody's destaca la fuerte implantación local de La Caja y el prestigio conseguido en Canarias, así como los adecuados gestión de los costes de explotación, perfil de riesgos y composición de su cartera crediticia.