MADRID/VALENCIA, 31 (EUROPA PRESS)
El Banco de España ha ofrecido un cuaderno de venta de Caja Mediterráneo (CAM) a Santander, BBVA, La Caixa, Popular y Sabadell después de que la entidad alicantina solicitara este miércoles el respaldo público tras fracasar el proyecto de fusión de Banco Base, han informado a Europa Press fuentes financieras.
El organismo que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez trata de encontrar con premura una solución para la CAM, que podría pasar a corto plazo por la entrada del FROB en el capital, para posteriormente propiciar su integración en un grupo solvente y con suficiente balance para asumir la entidad sin ver significativamente deteriorados sus ratios.
El supervisor y la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) mediaban desde la semana pasada para enjugar las discrepancias entre Cajastur y la CAM respecto a la valoración de activos de la alicantina cuyo deterioro del crédito ha hecho naufragar el proyecto para crear la tercera caja española por volumen de activos, tras La Caixa y Bankia.
El Banco de España recibió este miércoles la petición de respaldo del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) formulada por la CAM, sin hacer público el importe solicitado, después de que el regulador requiriese a las cuatro entidades que iban a formar Banco Base que le remitieran inmediatamente su nueva estrategia.
Las fuentes consultadas destacan que la CAM disfruta de una importante red comercial en la Comunidad Valenciana que cubriría la falta de presencia en la región del Santander, que ya ha manifestado su intención de arañar cuota de mercado en España a otros competidores y que contempla adquisiciones.
Entre los primeros puestos de los candidatos con más probabilidades para asumir la CAM también figura La Caixa, aunque se encuentra muy centrada en el proceso de consolidación de Caixabank en los mercados, especificaron las fuentes.
El eventual éxito del Banco de España en encontrar pareja a la CAM contribuiría a despejar las posibles dudas de los mercados internacionales respecto a su capacidad de encarar la reestructuración financiera en España y la viabilidad de las fusiones entre cajas de ahorros aprobadas hasta ahora, indicaron.
El instituto emisor español considera la intervención como la última opción y no toma el control de las entidades a no ser que detecte una situación de solvencia que impida el mantenimiento de la operativa y funcionamiento normal de la entidad.
Antes de que se disolviera el proyecto, Banco Base solicitó 2.784 millones de euros al FROB para cumplir con las nuevas exigencias de capital establecidas por el Gobierno. Dicho importe recogía la cantidad de capital adicional de 1.447 millones identificada por el Banco de España para cumplir con los nuevos requisitos de capital, más las necesidades derivadas de la situación de la CAM.
La petición de ayudas encaraba además las exigencias de solvencia incluidas en las pruebas de estrés que se aplicarán al sistema financiero español bajo mandato de la autoridad bancaria europea (EBA) en los próximos meses y cuyos resultados se darán a conocer en el mes de junio.