El sindicato Comisiones Obreras (CCOO) en Canarias registró pérdidas por más de 360.000 euros al cierre del ejercicio 2010, entre otros factores, por el descenso de los ingresos procedentes de la afiliación, según se desprende del informe hecho público este martes tras el compromiso de “transparencia” que asumió la organización con motivo de la última huelga general, el pasado 29 de septiembre.
Durante el año 2010, la afiliación al sindicato Comisiones Obreras (CCOO) cayó en 2.873 personas, un 5,36%, mientras que su representación lo hizo en 156 delegados, un 0,03%, que califica de “ligero descenso”.
Ello ha causado un “descenso de los ingresos correspondientes a las cuotas de la afiliación” al que suman la “drástica reducción” de las subvenciones públicas, así como los “gastos extraordinarios” derivados de la huelga general y los “elevados costes” de sus servicios jurídicos.
Trabajadores propios y ajenos
Según datos del sindicato, en 2010 se produjeron 69 negociaciones de convenios o revisiones salariales que afectaron a 181.094 trabajadores, con un incremento salarial medio del 1,23%. En el 2009 y el 2010, 177 convenios colectivos vencieron o no fueron renovados, afectando a un total de 172.912 trabajadores.
Además, en los 11 primeros meses del pasado año, se autorizaron en Canarias 315 expedientes de regulación de empleo que afectaron a 4.250 trabajadores, según CCOO, sindicato para el que 2010 trabajaban en el Archipiélago un centenar de personas. De ellas, el 30% prestaban servicios en programas subvencionados, otro 30 en los servicios jurídicos y el 40% restante era personal de estructura (sindicalistas o administrativos).
Sobre las subvenciones públicas recibidas, el sindicato afirma que “en su inmensa mayoría son para acciones finalistas” en materia de salud laboral, servicios a trabajadores inmigrantes, formación continua y orientación laboral y que las relacionadas con la actividad propia del sindicato han sufrido un “brutal recorte” que “las ha reducido casi a la nada”.
Perspectivas
Para 2011, CCOO considera “prioritario” reforzar el diálogo social, rectificar las “políticas de ajuste presupuestario”, mantener los servicios públicos y la Ley de Participación Institucional, así como el “desbloqueo de la negociación colectiva” y la “adaptación” del sindicato a los “nuevos escenarios impuestos por la actual crisis”.
Respecto a la coyuntura económica, la organización cree “necesario” que la actuación pública tenga como “direcciones claves” la “habilitación y dinamización de la actividad productiva estructural” y el “sostenimiento de la demanda interna” para “potenciar el consumo privado” y “activar el ciclo inversión-consumo”, en un marco donde el desarrollo y la actualización del Pacto Social por la Economía y el Empleo sea “una prioridad a corto plazo”.