Los aeropuertos canarios registrarán este viernes una jornada de incertidumbre tras anunciar UGT la suspensión de la huelga en los servicios de asistencia en tierra de Binter Canarias al haber llegado a un preacuerdo con la empresa, mientras que CCOO continuará el paro por considerar la propuesta insuficiente.
Las diferentes posturas que sobre el conflicto mantienen ambos sindicatos se reflejaron este jueves en los diversos anuncios que realizaron UGT y CCOO respecto a la continuidad de la huelga convocada en Atlántica de Handling, y que debía proseguir este viernes durante cuatro horas repartidas entre los turnos matutino y vespertino.
Así, CCOO ha difundido un comunicado en el que anuncia que este viernes se reanuda la huelga en los aeropuertos canarios porque, en su opinión, la oferta de Binter “discrimina” a los trabajadores y no permite una oferta global a toda la plantilla con independencia de si son subrogados de Iberia o de nuevo ingreso.
Sin embargo, el coordinador regional del sector aéreo de UGT, Orlando Robledano, dijo que el sindicato, mayoritario en el comité de empresa, ha decidido suspender la jornada de huelga prevista para este viernes, y a partir de este jueves por la noche y hasta el sábado hará asambleas informativas para divulgar el preacuerdo entre los trabajadores.
Según la decisión que adopte la plantilla UGT decidirá si la huelga continúa el domingo o se desconvoca definitivamente, añadió Robledano, quien aseguró que durante la negociación celebrada este jueves entre las fuerzas sindicales y la empresa, CCOO optó por “levantarse de la mesa”, mientras que UGT continuó negociando.
Explicó el dirigente sindical que el preacuerdo alcanzado incluye, entre otras cuestiones, un incremento salarial de casi un 40% para algunos trabajadores y se ha negociado la introducción de varios complementos salariales.
También se acuerda crear una comisión técnica para revisar los complementos del personal subrogado de Iberia y se regulariza el plus de transporte a los trabajadores de nuevo ingreso.
Además se reduce la jornada laboral anual en ocho horas y se ha logrado que la empresa reconozca el derecho a vacaciones de 30 días laborales, lo que según UGT significa “un aumento importante”.
También se acuerda constituir un plan de pensiones para el personal de nuevo ingreso dotado con 50.000 euros para 2007 y la misma cantidad para 2008.
Asimismo se propone un seguro colectivo por importe de 75.000 euros para todo el personal y se constituye un fondo, dotado con 9.000 euros en 2007 y 6.000 al año siguiente, para otorgar becas a los trabajadores.
Orlando Robledano subrayó que también se ha conseguido transformar a jornada completa 22 contratos a tiempo parcial de trabajadores de nuevo ingreso.
Detalló también que el personal subrogado a tiempo parcial pasará a disponer de 40 horas laborales, lo que afecta a 60 empleados, y también se ha alcanzado un acuerdo respecto a los billetes de avión para el personal de la empresa.
Robledano afirmó que también la empresa hará ofertas individuales a los trabajadores subrogados para compensar la pérdida de derechos que tenían anteriormente con Iberia, y este colectivo decidirá si admite dicha propuesta o no.
UGT valora el preacuerdo alcanzado y espera al pronunciamiento de los trabajadores para decidir la suspensión definitiva de la huelga, afirmó el representante sindical, que explicó que UGT cuenta con 18 delegados en el comité.
José Luis Reina, director de comunicación de Binter Canarias, subrayó que las negociaciones se prolongaron este miércoles desde las 17.00 horas hasta la una de la madrugada y este jueves continuaron las conversaciones hasta que los representantes de CCOO “se han levantado y se han ido dando un portazo sin dar razones”.
No obstante, Reina recordó que UGT, que ha aceptado el preacuerdo, es el sindicato mayoritario en la empresa y por lo tanto este viernes no habrá huelga en los aeropuertos del Archipiélago.
Sin embargo, CCOO insiste en su comunicado en que la empresa interpreta a su manera el convenio sectorial y no acepta pagar conceptos y pluses que el sindicato reivindica, con un régimen de trabajo a turnos “abusivo”, una compensación “insuficiente” de las horas extra y la pérdida del derecho a asistir a consultas médicas como permiso retribuido, entre otros asuntos.
Por ello, entiende que aceptar un acuerdo en esos términos sería “una tomadura de pelo a los trabajadores” y lamenta que la empresa haya utilizado “una vez más la negociación como el mero interés de dilatar el proceso”.