La Bodega Insular de La Gomera, gestionada por el Cabildo, trabaja en la elaboración del primer vino espumoso de plátano del mercado mundial, un caldo que, según informa el presidente de la Corporación, Casimiro Curbelo, nace con la finalidad de abrir nuevos mercados a la producción local de fruta y ofrecer así una nueva alternativa a los agricultores.
Curbelo precisa que este vino totalmente novedoso, pues no se conoce una producción similar en el mercado internacional, está aún en período de pruebas, pero ya ha sido muy alabado por diferentes enólogos requeridos por el Cabildo para que valoren la elaboración. “Todavía está por definir la graduación exacta, el color y el sabor del vino, para adaptarlo al gusto de los consumidores, pero los resultados hasta ahora son muy esperanzadores”, avanza.
El máximo representante insular insiste en que es muy importante para el plátano como materia prima encontrar un nuevo mercado, que en principio se correspondería con los 12 millones de turistas que visitan cada año el Archipiélago, “una poderosa clientela que busca siempre algo exótico y propio de la tierra”, dice el presidente antes de insistir en que, además, hay que contar con todos y cada uno de los canarios entre los que el vino espumoso de plátano podría tener muy buena aceptación.
12.000 litros por hora
Explica también que la producción de la Bodega Insular está planificada en 12.000 litros por hora, y que se necesitan 600 kilos de plátanos por hora, de modo que en un turno de cinco horas se consumiría 3.000 kilos de plátanos y sería posible elaborar 6.000 litros de caldo. “Importante igualmente es que se crearían 20 nuevas plazas de trabajo, y que se aprovechará al máximo la producción de fruta”, indica.
Entre las cualidades del vino espumoso de plátano los enólogos destacan que se trata de una producción natural, que transforma el almidón de la fruta en azúcar, ofreciendo un sabor dulce con un toque de cava. Debe beberse frío y resulta ideal para cerrar cualquier tipo de comida.
“Lo importante de esta producción es su carácter novedoso - insiste Curbelo -, que nos puede ayudar en la defensa de la producción y cultivo de plátanos, además de convertirse en un símbolo más de identidad para las Islas, para lo que será necesaria la colaboración empresarial de todo el Archipiélago”.
Por último, el titular de la Institución gomera señala que se trabaja ya en el logotipo, la etiqueta, la botella y la denominación que identificarán esta exclusiva producción gomera dirigida a todo el mercado internacional, y avanza que se apuesta por un diseño comercial y simpático, que pueda utilizarse con facilidad en los comerciales.