SANTIAGO DE COMPOSTELA, 1 (EUROPA PRESS)
El Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra no ha admitido a trámite la solicitud de concurso voluntario de acreedores solicitado por Clesa por “falta de competencia territorial”, aunque ha concedido las medidas cautelares reclamadas por la empresa y ha requerido a las compañías eléctricas correspondientes que mantengan el suministro de energía en la planta de Caldas de Reis (Pontevedra), la fábrica de Madrid y el centro de trabajo de Bascones del Agua (Burgos).
En un auto con fecha de este viernes, la magistrada Paula Araujo López señala que remitirá el expediente sobre el concurso solicitado por Clesa a los juzgados de lo mercantil de Madrid, que son los competentes en esta materia porque “el centro de intereses principales” de la empresa está en esa provincia y no en Caldas de Reis.
Al respecto, argumenta que “todo lo relativo a su actividad se encuentra en Madrid”, cuestión que ha puesto de manifiesto el Ministerio Fiscal, que también se ha pronunciado a favor de la competencia de los juzgados de lo mercantil madrileños.
Así, la magistrada señala que “la única conexión” con el juzgado de Pontevedra es la planta de Caldas, que cuenta con 160 trabajadores pero, “a lo largo de todo el territorio nacional”, la empresa dispone de más centros de trabajo con más de 800 empleados en total, mientras que su domicilio social y “todo lo relativo a su actividad” se encuentran en Madrid.
Por ello, la jueza de Pontevedra emplaza a Clesa a comparecer ante el juzgado de lo mercantil de Madrid que por turno le corresponda para tramitar su solicitud de concurso voluntario de acreedores. Contra esta decisión cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial en el plazo de cinco días.
MEDIDAS CAUTELARES
Pese a declarar la falta de competencia sobre el concurso de Clesa, en otro auto con fecha de este jueves, el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra ha decidido solicitar a las empresas Iberdrola, Detisa y Atel-Alpio que no corten el suministro eléctrico en la planta de Clesa de Caldas de Reis, la fábrica de Madrid y el centro de trabajo de Bascones del Agua.
Además, en este auto se requiere a la compañía Atel-Alpio que restablezca el suministro en el centro de trabajo de la división de helados Royne Jerez. Al respecto, la magistrada argumenta su decisión en “los graves perjuicios económicos” y las “graves consecuencias sociales y laborales” que acarrearía que se quedasen sin energía estos centros de producción.
El auto explica que, de no adoptarse la medida cautelar reclamada por la empresa el pasado 30 de marzo, “se causarían graves perjuicios económicos” que probablemente “harían inviable una de las finalidades principales del concurso, que es la posibilidad de convenio”.
Las medidas cautelares fueron adoptadas sin previa audiencia del demandado por “razones de urgencia” y contra este auto del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra, dictado el pasado jueves, no cabe recurso alguno, pero sí se pueden formular oposición en el plazo de 20 días.