La Dirección general de Comercio y Consumo del Gobierno de Canarias ha cifrado en un 21,5% los juguetes que presentaban irregularidades en su etiquetado, tras realizar la campaña regional de análisis en diciembre, aunque la acción de control continuará hasta el 5 de enero.
Al respecto, el director general de Comercio y Consumo, Gustavo Matos, ha recordado que la campaña busca comprobar si el etiquetado e información que acompaña a los juguetes cumple con las exigencias establecidas en la normativa vigente, indicando que también se analiza si se atienen a los requisitos de seguridad previstos en la ley, según señaló el Gobierno canario en un comunicado.
Hasta el momento, los inspectores se han presentado en 45 establecimientos no dedicados específicamente a la juguetería, donde han supervisado un total de 51 juguetes destinados a menores de 14 años, verificando que un total de once presentaba alguna irregularidad.
En este sentido, se apunta que en un 20% de los productos con fallos no figuraba el nombre o razón social del fabricante, importador o distribuidor de los mismos, mientras que en el 22% tampoco estaba la dirección del mismo.
Asimismo, se añadió que en el 18% no constaban las advertencias e indicaciones de uso, y en el 18% de los juguetes con irregularidades no figuraba el país de origen del producto, ni la información estaba escrita en español.
También se descubrió que en un 2% de los juguetes analizados no contaban con el marcado CE, mientras que en otro 2% este distintivo no tenía la forma y tamaño previsto normativamente.
Finalmente, tras detectar estas irregularidades se han iniciado las actuaciones oportunas para su corrección. La Dirección General de Comercio y Consumo recuerda que se adoptan las medidas pertinentes en todos los casos en que se constata la existencia de un producto “inseguro”.