El secretario general del SOMA-UGT de Asturias, José Ángel Fernández Villa, ha comparado la política del Estado español con la aplicada en su día por el ex presidente estadounidense Ronald Reagan y, especialmente, por la ex primer ministra británica Margaret Thatcher, que, a su juicio, llevó a los trabajadores a un callejón sin salida hasta no solo cerrar la minería sino llevarlos “a una derrota psicológica y humana”, de la que a miles de ellos les ha quedado secuelas, mientras las comarcas han quedado en la más absoluta marginación. “Eso aquí no lo vamos a permitir”, ha apostillado.
Sus declaraciones se produjeron antes de que los mineros cortasen el tráfico de acceso a El Musel durante aproximadamente 20 minutos, por la entrada del Arbeyal. Previamente se habían dirigido al parque de carbones de El Musel unos 2.500 manifestantes, aunque la Policía les cortó el paso.
En opinión de Villa, el ministro de Industria, José Manuel Soria, parece que no se ha leído ni el Plan General de la Minería del Carbón, además de someterles a agravios comparativos con otros sectores. Se ha preguntado si les compara con el rescate a la banca por la mala gestión o con el dinero que va a recibir Renfe. “Las ayudas que necesita el carbón es el chocolate del loro, ya no puede producirse más ajuste, estamos bajo mínimos en producción y en empleo”, ha manifestado el dirigente sindical.
Estrategia de división
A este respecto, ha recriminado al Gobierno central que intente el “divide y vencerás”, al poner un mediador que les ha dado una “lección teórica” que choca contra la práctica, a su juicio. A este le ha reprochado también que haga negociaciones unilaterales, primero con la patronal, luego con CCOO y después con UGT.
“Con toda una intención de dividirnos”, ha indicado José Ángel Fernández Villa, antes de dejar claro que ambos sindicatos están de acuerdo en presentarse este martes con los representantes que les corresponden en la Comisión de Seguimiento. “Allá la decisión que pueda tomar el Gobierno”, ha apuntado, al tiempo que ha adelantado que si no acepta este mecanismo de la Comisión de Seguimiento quedará retratado que el Gobierno “no tiene la voluntad de dialogar, sino la de liquidar una actividad y marginar unos territorios”.
Ha criticado, además, que hay un cerrajón “total y absoluto” a que los representantes de los trabajadores puedan bajar al interior de la mina para ni siquiera llevarles alimento a los mineros encerrados. La comida se coloca en la jaula y los representantes sindicales no pueden bajar ni para hablar con sus compañeros, ni transmitirles las actuaciones y la solidaridad que hay con su causa. “Supone una involución importantísima en las relaciones laborales de la empresa”, ha reprochado.
Planes en discusión
Villa ha recalcado que están defendiendo, por un lado, el Plan General de la Minería del Carbón, en todos sus parámetros -sectoriales, plantilla y diversificación- y, por otro, el Plan de Hunosa, del que según él “poco se habla”, ya que depende del primero, a excepción del convenio colectivo.
En este sentido, ha asegurado que Hunosa en este momento está incumpliendo la plantilla, la subida del convenio colectivo del dos por ciento pactado, el incremento también de dos por ciento de la paga del 1 de mayo. En cuanto a la plantilla, ha indicado se incumple el compromiso de 2002 de 2.000 trabajadores.
A esto ha sumado que la diversificación de la empresa ha sido “un auténtico fiasco”. Villa ha indicado que el compromiso era crear 900 puestos de trabajo por la vía de la diversificación, estables y de calidad, cuando se han creado solo 340, por lo que hay un déficit de 560.