El Parlamento Europeo ha ratificado este jueves el Acuerdo agrícola entre la Unión Europea (UE) y Marruecos por 369 votos a favor, 225 en contra y 31 abstenciones, con lo que entrará definitivamente en vigor. La ratificación ha provocado “una gran desolación en el sector hortofrutícola porque las consecuencias agravarán la pérdida de empleo y la crisis en España”, afirman los representantes de la Federación Española de Productores y Exportadores (Fepex).
“La ilusión de una primavera política árabe, las expectativas de apertura del mercado marroquí a los excedentes comunitarios de cereales y productos lácteos y la presión del país vecino han sido determinantes”, lamentan. Fepex considera que el Parlamento Europeo “no ha tenido en cuenta las graves consecuencias que el actual acuerdo ya tiene en las zonas de producción españolas. Solo en el sector de tomate y en el último año, el acuerdo en vigor ha provocado la destrucción de 12.500 empleos en comunidades autónomas como Andalucía, Canarias, Valencia o Murcia, con tasas de paro superiores al 30%”.
Ahora, advierten los exportadores, “esta situación se extrapolará a otras producciones hortofrutícolas y a otras comunidades, puesto que el nuevo acuerdo prevé la liberalización del comercio de prácticamente todas las frutas y hortalizas con Marruecos. Los europarlamentarios no han tenido en cuenta las diferencias productivas, medioambientales y las abismales diferencias en los costes salariales existentes entre Marruecos y la UE y se exige que se compita en igualdad de condiciones”, insistieron.
El Parlamento Europeo, y previamente la Comisión Europea y el Consejo que firmaron el acuerdo en diciembre de 2010, “tampoco han tenido en cuenta los reiterados incumplimientos del protocolo en vigor por parte de Marruecos, incumplimientos confirmados por la Oficina de Lucha Contra el Fraude de la UE (OLAF), y que no han sido objeto de ninguna actuación por parte de la Comisión Europea”.
“Hoy es un día triste para el sector hortofrutícola, que afronta ahora un nuevo marco de competencia. Se producirán cambios sustanciales tanto en los calendarios como en la composición por especies y variedades. Por ello es prioritario facilitar los cambios hacia un modelo productivo que permita afrontar la nueva y difícil situación. En cultivos protegidos la eficiencia energética con la incorporación de la cogeneración a las explotaciones y otras fuentes de energía será determinante del futuro. Es también determinante la plena integración en el régimen de pagos directos del sector de frutas y hortalizas, la aprobación de medidas de gestión de crisis eficaces y la reforma del sistema de precios de entrada”, adevierte Fepex.
El valor de la producción de frutas y hortalizas en España en 2011 ha caído un 11% con relación al año anterior, pasando de 15.269 millones de euros a 13.616 millones, según datos del Ministerio de Agricultura. Las frutas y hortalizas representan el 60% de la producción agraria española.