La Asociación Profesional de la Magistratura (APM) ha mostrado este martes su rechazo “más absoluto” a las declaraciones realizadas por la diputada nacional de Coalición Canaria (CC) Ana Oramas, calificó de “goda” a la juez titular del Juzgado de Instrucción número 5 de lo Contencioso Administrativo de Las Palmas que ha suspendido de forma cautelar los mogollones y los chiringuitos del carnaval en la zona del Parque de Santa Catalina.
La asociación mayoritaria entre los jueces manifiesta su apoyo a la compañera afectada y ve innecesario destacar el carácter “claramente despectivo” que tiene esta expresión en el Archipiélago.
La APM explica que las resoluciones judiciales están sujetas “como no podía ser de otro modo en un Estado de Derecho” a las críticas de los ciudadanos en general y del resto de poderes públicos en particular, cosa que los jueces asumen “como parte consustancial” de su trabajo.
Sin embargo, no admiten “el insulto y la descalificación” cuando no se está de acuerdo con una decisión judicial ya que esto atenta “contra los principios básicos de respeto y lealtad institucional” pudiendo incluso llegar a suponer “un ataque a la independencia judicial”.
Además, recalcan que un representante de la soberanía popular “debería extremar el cuidado en sus declaraciones” ya que “flaco favor se hace a la Justicia” en un momento de escasez de medios y exceso de trabajo.