Gamá y los estudiantes de la ULPGC protestan por la desaparición de sus chiringuitos

Efe

Las Palmas de Gran Canaria —

El colectivo Gamá, que aglutina a lesbianas, gais, transexuales y bisexuales de Canarias, y el Consejo de Estudiantes de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria han denunciado este martes la desaparición de la docena de chiringuitos que disponían en las próximas fiestas del carnaval.

Los presidentes de Gamá y del Consejo de Estudiantes, Pablo Almodóvar y Eliezer Santana, respectivamente, han informado en rueda de prensa de que sus chiringuitos no figuran este año en las bases de la convocatoria publicada por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, un cambio “unilateral” para el que no se les ha consultado, según han afirmado ambos representantes.

Así mismo, han lamentado que, pese a sus intentos de mantener una reunión con la concejal del área, Inmaculada Medina, para abordar esta situación, desde la corporación no se les ha contestado, al tiempo que han advertido de que “no consentirán que se privatice el carnaval” de la ciudad, pues entienden que es la intención que persigue el nuevo gobierno municipal.

Solo la Sociedad de Promoción del Carnaval ha comunicado a los estudiantes que están intentando ver cómo se puede resolver la situación, ha señalado Santana, quien ha criticado la “improvisación” en la organización de estas fiestas por parte de la corporación.

Ambos colectivos consideran “sorprendente” esta actitud del gobierno municipal, que confían en que se pueda resolver para que puedan contar como el pasado año con sus chiringuitos en la trasera del parque de Santa Catalina.

Almodóvar ha subrayado que, en el caso de Gamá, se trata de “espacios para la reivindicación de la igualdad y la transgresión, muy aclamados y con mucha significación”, que desempeñaban una función social y del que ahora se “priva” a la ciudad.

El dinero que se recauda en estos chiringuitos se destina a financiar proyectos que desarrolla Gamá, ha indicado Almodóvar, al tiempo que ha recordado que los conocidos “chiringais” se instalan desde hace diez años y costó mucho “consolidarlos”, por lo que ha confiado en que se pueda resolver este problema.

Santana, por su parte, ha informado de que el dinero de los chiringuitos de los estudiantes, que el pasado año lograron obtener reunir entre 2.000 y 3.000 euros, se destina a financiar los actos de graduación y viajes de fin de curso.