La consulta contra las prospecciones petrolíferas ya tiene fecha: 23 de noviembre de 2014. Y tiene pregunta: “¿Cree usted que Canarias debe cambiar su modelo medioambiental y turístico por las prospecciones de gas o petróleo?”
Estos dos hitos en el empeño del Gobierno de Canarias por conseguir que “el pueblo hable” han sido anunciados por el presidente del Ejecutivo, Paulino Rivero, tras la reunión que mantuvo en la sede de Presidencia de Santa Cruz de Tenerife con los presidentes de los cabildos de Fuerteventura y Lanzarote y los partidos políticos y colectivos sociales contrarios a las prospecciones que hará Repsol en aguas cercanas a Canarias.
Una pregunta a la que podrán responder todos los “residentes legales” mayores de 16 años y empadronados en Canarias aunque vivan en el exterior. Incluso se habilitará un punto en Madrid para que se pueda votar de forma presencial en la capital de España. Además, se podrá contestar vía telemática por internet.
Consistente y pensada
La fecha elegida está alejada 14 días de la consulta catalana para que no quede contaminada por el conflicto secesionista, y la pregunta ha sido consensuada, “consistente” y “pensada” para evitar que pueda ser recurrida por el Gobierno de España, como ha sucedido con el proceso impulsado por la Generalitat.
“Es una pregunta que responde a nuestra normativa y a nuestras competencias canarias. Encaja dentro de la Constitución y el Estatuto de Autonomía. No prevemos ninguna decisión del Gobierno de España interfiriendo de forma política esta consulta, pero si lo hace, estamos seguros que ganaremos ante la Justicia”, ha afirmado Rivero.
El presidente ha insistido en que la consulta, por mandato del Parlamento de Canarias, se celebrará después de que hayan transcurrido ocho meses sin que el Gobierno de España se haya dignado a contestar los requerimientos del Ejecutivo canario para que autorizara que los canarios pudieran pronunciarse al respecto.
Deslealtad
“Ha sido una falta de respeto absoluta, una falta de lealtad, porque admitimos que pueden existir dos perspectivas y visiones distintas, pero no puede faltar el diálogo y descortesía en un asunto relevante que ha llevado a la calle a la población”.
En cuanto a la posibilidad de que el enunciado de la pregunta se base en una suposición en vez de en un hecho cierto, Rivero ha insistido en que “es constatable que el petróleo pone en riesgo la simbiosis entre el medioambiente y el turismo, de los reducidos naturales que tiene Canarias”.
“La propia Repsol indica que es una actividad de riesgo y peligrosa que puede truncar las perspectivas de desarrollo socioeconómico”, ha concluído el presidente.