Ahmadineyad afirma que Irán puede enriquecer uranio al 80 por ciento, pero no lo hace “porque no quiere”

TEHERÁN, 11 (Reuters/EP)

El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, anunció este jueves que Irán ya ha producido su primera remesa de uranio enriquecido al 20 por ciento y aseguró que el país tiene capacidad para enriquecer uranio “hasta el 80 por ciento” en sus instalaciones de Natanz y que, si no lo ha hecho, es “porque no ha querido”. Las declaraciones del presidente coinciden con las manifestaciones por el 31 aniversario de la Revolución Islámica, en las que se han registrado enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los grupos de la oposición de los que no se han salvado ni el ex candidato presidencial Mehdi Karoubi ni el ex presidente Mohamed Jatamí.

“Gracias a Dios, se nos ha informado de que ya se ha producido la primera remesa de uranio enriquecido al 20 por ciento y ya se ha puesto a disposición de los científicos”, declaró el presidente en un discurso televisado. “En un futuro próximo, triplicaremos esta producción”, prosiguió. “En estos momentos, en Natanz, tenemos capacidad para enriquecer uranio a niveles mucho más altos, incluso hasta el 80 por ciento, pero no lo hemos hecho porque no lo necesitamos”, manifestó.

Hasta la fecha, Irán enriquecía el uranio al 3,5 por ciento, el nivel requerido para una central nuclear, y los expertos occidentales creen que el enriquecimiento al 20 por ciento supone un paso hacia el enriquecimiento al 90 por ciento, el nivel necesario para la fabricación de una bomba atómica. Las grandes potencias occidentales acusan a Irán de tener en manos un programa armamentístico nuclear, pero Teherán --quinto exportador mundial de petróleo-- ha insistido en que sus propósitos son meramente energéticos y pacíficos.

“Cuando decimos que no estamos construyendo bombas nucleares, lo que queremos decir es que no queremos construirlas porque no creemos que debamos tenerlas”, aseveró Ahmadineyad. “La nación iraní es lo suficientemente valiente como para, si algún día decide construir bombas nucleares, anunciarlo públicamente sin temer a nadie”, proclamó.

Este pasado martes, la Organización de la Energía Atómica de Irán (OEAI) empezó a inyectar gas en una cascada de centrifugadoras de la central nuclear de Natanz para enriquecer uranio hasta conseguir una pureza del 20 por ciento, según informaron ese día los medios de comunicación iraníes. El embajador iraní ante la la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), Alí Asqar Sotaniyeh, comunicó este pasado lunes a este organismo la decisión de Teherán de enriquecerlo al 20 por ciento. La República Islámica ha pedido que durante el proceso de enriquecimiento estén presentes inspectores de la AIEA “porque todas las actividades nucleares iraníes están y estarán bajo la supervisión de la agencia”, subrayó Soltaniyeh.

El siguiente paso, según Teherán, es trasladar el uranio a las instalaciones atómicas de Isfahán para transformarlo en combustible para el reactor nuclear de investigación de Teherán, que produce isótopos médicos y que debería empezar a contar con este combustible este mismo año. No obstante, Irán carece de los medios técnicos necesarios para convertir el uranio enriquecido en un 20 por ciento en el combustible necesario para el reactor, lo cual ha contribuido a generar serias dudas sobre los propósitos reales de Teherán.

Los expertos occidentales creen que el enriquecimiento al 20 por ciento supone una escala técnica con vistas al enriquecimiento del uranio al 90 por ciento, el nivel necesario para la fabricación de una bomba atómica. El mayor problema, según los expertos, es pasar del 3,5 al 20 por ciento. Una vez logrado, elevar el nivel al 80 por ciento es relativamente fácil. No obstante, Irán tampoco dispone de la tecnología necesaria para convertir el uranio altamente enriquecido en armamento atómico. El jefe de la Inteligencia de Estados Unidos, Dennis Blair, admitió el año pasado que Teherán no tendría capacidad para construir armas nucleares antes de 2013.

MANIFESTACIONES

Las fuerzas de seguridad se han enfrentado con los grupos de la oposición con motivo de los actos celebrados en el centro de Teherán para conmemorar el 31 aniversario de la Revolución Islámica, según informaron fuentes opositoras. Los periodistas de medios extranjeros no han podido cubrir estos incidentes, entre los que destacan las agresiones al dirigente opositor y ex candidato presidencial Mehdi Karubi o al ex presidente Mohamed Jatamí, la detención de una nieta del fundador de la República Islámica, ayatolá Ruholá Jomeini, o los supuestos disparos con fuego real efectuados contra los partidarios del opositor Mir Hossein Musavi.

Por una parte, Zahra Eshraqi, nieta del ayatolá Ruholá Jomeini, ha sido detenida junto a su marido, Mohamed Reza Jatamí, hermano de Mohamed Jatamí, según la página de Internet opositora Jaras, que también dio cuenta de “un gran número” de detenciones durante las manifestaciones de hoy. Según esta fuente, ambos fueron posteriormente liberados. Sin embargo, según la web reformista Parlemannews, el matrimonio no fue detenido, sino que se les impidió que se sumaran a la multitud por su propia seguridad y posteriormente se les permitió marcharse.

Asimismo, según Jaras, las fuerzas de seguridad también han detenido a un hijo de Mehdi Karubi. Poco antes, la misma fuente aseguró que las fuerzas de seguridad iraníes habían atacado el automóvil del propio Karubi, quien “no sufrió heridas graves”, y a Mohamed Jatamí mientras participaban en las manifestaciones. Asimismo, otra página de Internet de la oposición, Voz Verde, denunció que la Policía había disparado con fuego real y había lanzado gases lacrimógenos contra un grupo de partidarios de Musavi concentrados en el centro de Teherán.

Estas informaciones no han podido confirmarse por otras fuentes independientes porque los periodistas que trabajaban para medios extranjeros fueron escoltados hasta la Plaza Azadi, donde se celebraba la manifestación oficial, y no se les permitió cubrir las concentraciones de la oposición. La televisión estatal ha mostrado imágenes de cientos de miles de personas, algunas de ellas con banderas iraníes y fotografías del líder supremo, ayatolá Alí Jamenei, dirigiéndose hacia la Plaza Azadi ('Libertad'), en el centro de la ciudad.

Por otra parte, la página de Internet opositora Kalame, próxima a Musavi, ha asegurado que los partidarios de la oposición han recibido amenazas a través de sus teléfonos móviles por parte de los servicios de inteligencia. El diario británico 'Guardian' muestra en una fotografía uno de los supuestos textos amenazantes.

LOS MUYAHIDINES DEL PUEBLO

Fuentes del grupo opositor iraní Organización de Muyahidines del Pueblo de Irán (PMOI) aseguraron en un comunicado difundido por correo electrónico que “numerosas personas valientes y jóvenes se reunieron en la plaza Aryashahr de Teherán para protestar contra el régimen religioso fascista, con lemas como 'libertad para los presos políticos', 'muerte al dictador' y 'Dios es grande'”.

“Los agentes de seguridad del régimen han golpeado, herido y detenido a dos mujeres jóvenes”, añadió. Asimismo, aseguró que los manifestantes se enfrentaron a las fuerzas antidisturbio en la calle Sattar Jan y denunció que la fuerza paramilitar Basij y varios grupos de “hooligans y matones”, atacaron con cuchillos “a las personas que entonaban lemas contra el régimen”. A diferencia de los grupos reformistas, los Muyahidines del Pueblo se oponen abiertamente a la República Islámica desde sus cimientos. El PMOI ha sido declarado “grupo terrorista” por Teherán.