ROMA, 20 (Reuters/EP)
El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha prometido reformas radicales para reformar el sistema judicial, intensificando la ofensiva contra los jueces.
El mandatario, de 74 años de edad, acosado por varios escándalos políticos y personales, lleva criticando desde hace mucho tiempo a los magistrados “comunistas” por perseguirle bajo “falsas acusaciones”. Los opositores señalan que las reformas tienen como objetivo proteger al primer ministro, que debe ser juzgado por tres casos de fraude y malversación de fondos en los próximos meses, además de la acusación de prostitución.
“He trabajado para evitar que la voluntad de la izquierda prevalezca a través de las armas judiciales”, dijo Berlusconi en una conferencia telefónica, repitiendo su frecuente lamento de que es el “hombre más perseguido en la historia del sistema judicial”.
Los comentarios son la última indicación de que Berlusconi planea pelear después de haber sido condenado a un juicio bajo cargos de haber pagado para tener relaciones sexuales con una bailarina marroquí de 17 años de edad, apodada 'Ruby Heartstealer'. También se le acusa de abusar de su posición, presionando a la Policía para la liberación de 'Ruby' cuando fue detenida por robo el año pasado. Berlusconi niega los cargos.
“Tenemos que resistir, seguir gobernando y hacerlo con serenidad, pero sobre todo, tenemos que centrarnos en hacer estas reformas”, ha dicho Berlusconi, prometiendo una reunión extraordinaria del gabinete en cuestión de días para aprobar las medidas. “Si es necesario, habrá un referéndum, porque creo que todos los italianos quieren un poder judicial imparcial”, ha agregado.
Un objetivo clave de las reformas será el Tribunal Constitucional, que el mes pasado revocó partes fundamentales de una ley que otorga inmunidad automática a Berlusconi en caso de procesamiento. Bajo la reforma propuesta por el mandatario, una mayoría de dos tercios en la Corte (formada por 15 miembros) será necesaria para derogar una ley.
“Esto es para evitar que se repita la situación que vemos reformas radicales hoy en día cuando el Parlamento discute una ley y la aprueba. A continuación, los magistrados de izquierda, si no les gusta, la llevan ante el Tribunal Constitucional, compuesto principalmente por jueces izquierdistas, que derogan leyes que son justas y muy justas”, ha apuntado el primer ministro.
Miembros de la oposición han manifestado que la reforma propuesta por Berlusconi es una señal de “desesperación” y de “irresponsabilidad”.