Las operaciones de rescate en la mina San José, en el norte de Chile, han concluido con la salida al exterior de Luis Urzúa, jefe de turno en el yacimiento cuando se produjo el derrumbe el pasado 5 de agosto.
Urzúa, topógrafo de 54 años, lleva a sus espaldas 31 años de experiencia en la minería y empezó a trabajar en el yacimiento San José hace diez meses. Su salida a la superficie se produjo a las 01.55 hora canaria (21.55 del miércoles en Chile).
Urzúa fue el primero en contactar con el exterior y quien ha organizado la vida bajo tierra de los atrapados, ejerciendo como líder, pues el resto de mineros siempre mantuvieron respeto hacia su cargo. Así, organizó el racionamiento de alimentos y dividió el espacio en tres zonas: una para dormir, otra para comer y una tercera para las necesidades básicas, informaron los medios chilenos.
En una conversación con el presidente del país, Sebastián Piñera, calificó de “infierno” el día del accidente. “Sentimos que se venía la montaña bajando hacia nosotros y sin saber lo que pasaba”, dijo al mandatario.
Al salir a la superficie se envolvió con una bandera chilena y fue recibido con gran júbilo por sus familiares y las autoridades presentes. El responsable de los operativos de rescate, Andrés Sougarret, y Piñera no pudieron contener las lágrimas mientras Urzúa se disponía a salir de la cápsula que lo llevo desde el interior del yacimiento al exterior.
En el interior de la mina ya sólo quedan los seis miembros de los equipos de rescate que descendieron este miércoles para ejecutar el operativo que ha permitido sacar a la superficie a los 33 mineros.