La pandemia de la COVID-19 y, más recientemente, la guerra en Ucrania, han afianzado al puerto de La Luz y de Las Palmas como base logística “llave” del Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (PMA), ya que su uso acorta de 120 a 30 días su capacidad de llevar comida a lugares afectados por emergencias humanitarias.
Así lo ha recalcado este jueves en Casa África la responsable del Mecanismo de Gestión Global de Alimentos de este programa de la ONU, Debora Debernardis, quien ha explicado en el seminario La participación de Canarias en el Programa Mundial de Alimentos la estrategia de preposicionamiento que desarrolla en la base logística de Las Palmas de Gran Canaria.
En la presente coyuntura inflacionista, que ha elevado el precio de los contenedores al menos un 20 por ciento, lo que hizo casi imposible enviar comida a los puertos de Tomé (Togo) o Duala (Camerún) en 2022, la base estratégica del PMA en el puerto de la capital grancanaria se ha revelado de vital importancia para planificar con suficiente antelación y poder llegar así a tiempo donde se necesita.
Debernardis ha resaltado que desde 2014, esta base del PMA apoya al Mecanismo de Gestión Global de Alimentos, un instrumento innovador que consiste en comprar con antelación la comida, cuando los precios están bajos, y hacer una estrategia de preposicionamiento en Las Palmas o en los lugares más cercanos, antes de que llegue la contribución, lo que acortará de 120 a 30 días su tiempo de entrega.
La responsable de este mecanismo ha subrayado que hoy es esencial hacer una estrategia de estas características, ya que, por ejemplo, hace cuatro años los productos nutritivos se podían comprar con cuatro meses de antelación, pero si ahora se pretende hacer una compra para niños o para programas escolares tarda ocho meses en llegar porque todos los proveedores de Bélgica o Francia están ocupados con la producción y afectados por la subida de precios y la falta de contenedores derivada de la guerra de Ucrania.
Por todo ello, hay que planificar por lo menos con un año de antelación y, si no están claras las contribuciones que van a llegar, “es imposible, sobre todo para los países costeros”.
Las grandes operaciones del Sahel o Etiopía reciben mucha atención de la UE y el mundo, pero los países costeros, como Mauritania, Sierra Leona, Guinea o Senegal, no reciben tanta, por eso es más difícil hacer una planificación de largo recorrido y aquí entra Las Palmas por diferentes variables, como su capacidad de almacenamiento, las buenas condiciones en las que se hace y las garantías que ofrece sobre la calidad de la comida, ha referido.
Debernardis ha celebrado que el PMA haya recibido este año una donación adicional de España que permitirá incrementar de 15.000 a 30.000 las toneladas que van a pasar por su base de Las Palmas de Gran Canaria.
El secretario del Consejo Canario del Movimiento Europeo y director del Campus Internacional de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Lucas Pérez, ha resaltado que este seminario se desarrolla en virtud de una subvención de la convocatoria sobre prioridades de la política exterior española de la Secretaría de Estado de la España Global.
“Queremos destacar la trascendencia que tiene Canarias para la política exterior española y para la política alimentaria de la ONU por ser base logística de nuestra ayuda a África, más ahora”, cuando la desnutrición y la hambruna se agudiza en ese continente “tras el inicio de la guerra de Ucrania y la imposibilidad que está habiendo de utilizar algunos puertos”, ha aseverado.
A juicio de Pérez, “esta crisis ha demostrado que, a largo plazo, podemos incrementar de forma notable la llegada de ayuda de alimenticia a África” desde la base del PMA en Las Palmas de Gran Canaria.
Sobre el empeoramiento de las condiciones de vida en el continente vecino, el director de Casa África, José Segura, ha detallado que más de 40 millones de africanos están amenazados por la inseguridad alimentaria derivada de la sequía.
Segura también ha aludido a un reciente informe del Banco Mundial que alerta de que casi 30 millones de africanos dependen de ayuda alimentaria de emergencia y atribuye la hambruna que afecta al continente a su fragilidad, los conflictos, la pobreza, el cambio climático y su baja productividad agrícola.
El presidente del Consejo Canario del Movimiento Europeo, Manuel Medina, ha recalcado que el trabajo que desarrolla el PMA no es repartir donativos, sino cubrir necesidades de la nueva globalización occidental de la que es víctima el resto del mundo.
El representación del PMA en Canarias, David Chalila ha recordado que en 2009 se produjo desde Las Palmas de Gran Canaria, gracias a la AECID, el primer envío de gofio con destino a los campos de refugiados de Tinduf, en Argelia, lo que permitió a este programa de Naciones Unidas “descubrir las ventajas logísticas de las islas y las particularidades que ofrece ese territorio de la UE situado a las puertas de África”.
Desde entonces, a la base del PMA en Las Palmas de Gran Canaria han llegado más de 300.000 toneladas de alimentos que han llegado a más de seis millones de personas.
El presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra, ha considerado que tras el bagaje acumulado por el PMA en el La Luz se podría “intentar que este puerto tuviera una actitud más activa” con este programa de la ONU.